Gildardo López Astudillo “El Gil”, presunto líder de la célula delictiva Guerreros Unidos, responsable de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa en 2014, tramitó un amparo para evitar ser detenido.
Lo anterior, luego de que un juez en el Reclusorio Oriente liberó una orden de aprehensión en su contra
El que fungiera como testigo colaborador de la Fiscalía General de la República (FGR) en el caso, presentó la demanda de amparo y pidió protección del Poder Judicial, tras presentar el martes pasado el recurso legal al Juzgado Segundo de Distrito de Amparo en Materia Penal de la Ciudad de México.
La autoridad concedió cinco días a López Astudillo para que presenta pruebas u observaciones de su petición; al término del plazo se emitirá un resolutivo final.
“El Gil” salió de prisión en septiembre de 2019, una vez que un juez en Tamaulipas desestimó las 81 pruebas en su contra, además, que la Fiscalía General de la República (FGR) no volvió a presentar más pruebas en su contra. “Se dicta sentencia absolutoria en favor de Gildardo López Astudillo, alias El Gil, por el ilícito de privación de la libertad, en la modalidad de secuestro”, destacó la sentencia.
“Se dicta sentencia absolutoria en favor de Gildardo López Astudillo, alias El Gil, por el ilícito de privación de la libertad, en la modalidad de secuestro”, destacó la sentencia.
López Astudillo fue detenido en septiembre de 2015 en Guerrero, y estuvo cuatro años en la prisión de máxima seguridad del Altiplano; además que logró convertirse en testigo protegido y bajo su testimonio, se acusaron a militares y diversas autoridades, que presuntamente estuvieron coludidos con su grupo criminal. El presunto criminal también fue víctima de tortura durante sus años en reclusión.
Además, bajo el criterio de oportunidad, presuntamente aportó diversas pruebas para el esclarecimiento de los 43 normalistas de Ayotzinapa, mismos que desaparecieron el 236 de septiembre de 2014.
A pesar de que El Gil reiteró en diversas ocasiones que no participó en los hechos de Iguala, los informes del Gobierno federal aseguran que fue jefe regional de Guerreros Unidos y en su cargo, ordenó a los policías de Iguala y Huitzuco en Guerrero, que le entregaran a los normalistas de Ayotzinapa.
Padres de los 43 normalistas han criticado que el Gobierno federal creyó el testimonio de uno de los criminales encargados de la desaparición de sus hijos, lo que reprocharon de manera constante, por no tener validez para ellos.
El amparo de López Astudillo se da en el marco de las protestas de los padres, quienes pugnan por una reunión urgente con el Presidente Andrés Manuel López Obrador, a fin de que les muestren avances del caso y les expongan sus demandas; asimismo, los familiares exigen la entrega de 800 folios en los que presuntamente podrían existir indicios del paradero de al menos 17 estudiantes, luego de que el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI), dio a conocer su existencia al hallar una conversación en poder del Ejército.
De esta manera, los padres aseguran que el exlíder de Guerreros Unidos puede conocer el destino o paradero de algunos de sus hijos, debido a que los
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