El exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex), Emilio Lozoya Austin, compareció por su presunta participación en actos de corrupción en el caso Agronitrogenados; sin embargo, ante acusaciones de “imparcialidad” de la Fiscalía General de la República (FGR) y de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), el juez de Control, Gerardo Alarcón López, se abstuvo de llevar a cabo la audiencia intermedia, hasta que un Tribunal de Apelación determine si es competente para seguir en el caso.
Fue así que el juez federal aplazó por tiempo indefinido la audiencia en la que la FGR tenía previsto acusar formalmente a Emilio Lozoya por lavado de dinero y solicitar una condena de 15 años de prisión por el caso Agronitrogenados.
Con una apariencia desmejorada, el exfuncionario llegó al Centro de Justicia Penal Federal del Reclusorio Norte de la Ciudad de México, acompañado por su representante legal, para presentarse ante el juez. Ataviado con un traje azul y corbata morada, llegó a bordo de un automóvil de la marca Mercedes Benz.
Durante la diligencia que duró tres horas en el Reclusorio Norte, los fiscales de la FGR y los representantes legales de la Unidad de Inteligencia Financiera presentaron una solicitud de impedimento para que el juez Alarcón López no siguiera conociendo del asunto.
“Usted está impedido para llevar a cabo la audiencia porque su imparcialidad está cuestionada, por lo que pedimos que se excuse”, dijo Antonio López, representante de la UIF.
Ante ello, el juez de control declaró infundados los argumentos de la Fiscalía General de la República y de la Unidad de Inteligencia Financiera.
Cabe recordar que a Emilio Lozoya se le acusa de recibir por parte de Alonso Ancira un soborno de 3.4 millones de dólares para facilitar que Pemex comprara la planta chatarra de AHMSA. Lozoya salió de prisión hace dos meses y medio y porta brazalete de monitoreo electrónico.
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