El Instituto Nacional Electoral (INE) entregó los últimos expedientes de los cómputos distritales de la elección presidencial, al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) que ahora tendrá la tarea de validar los resultados y para lo cual se comprometió apegarse a la ley.
Con este acto, concluyó la mayor responsabilidad del INE dentro del proceso electoral 2023-2024.
En sesión pública, las presidentas de ambas instancias, Guadaluppe Taddei y Mónica Soto, respectivamente, sostuvieron que la conducción del proceso, los resultados y las coincidencias en los distintos métodos para verificar la votación dan cuenta de la transparencia que se preservó y de que el país cuenta con “instituciones democráticas sólidas”.
La magistrada presidenta Mónica Soto mencionó que con esto concluyen las tareas del INE y ahora corresponde a la Sala Superior del Tribunal continuar con la etapa de resolución de las impugnaciones, para dar pie a una “transmisión pacífica del poder público”.
Recordó que será esta Sala la encargada de efectuar el cómputo final de la elección, luego de que se hayan resuelto las inconformidades, las cuales dijo que deben entenderse como un “aspecto normal, democrático” pues para ello se cuentan con los cauces legales diseñados para tal fin.
“Para eso contamos con las instituciones electorales mexicanas, para dar cauce a todas las visiones políticas y también a una resolución pacífica y apegada a la ley de todas las diferencias que puedan presentarse”, dijo.
Negó que los medios de impugnación debiliten al sistema, sino lo contrario pues da la posibilidad de asegurar a los mexicanos y la comunidad internacional que el país es transparente.
La consejera presidenta del INE, Guadalupe Taddei destacó que el haber concluido la entrega de los expedientes físico de la elección permitirá a la Sala Superior del Tribunal llevar a cabo una de sus más importantes y trascendentes atribuciones que es rectificar a quien ocupará la Presidencia de la República.
“Su labor asegura que cada voto cuente y que cualquier inconformidad sea atendida con imparcialidad y rigor jurídico. Su intervención es clave para mantener la confianza en la ciudadanía en el Sistema Nacional de Elecciones y en la democracia misma”, destacó.
Asimismo, recalcó que la colaboración entre el INE y el TEPJF es ejemplo de la “solidez institucional” de la democracia mexicana, pues trabajaron en conjunto para que cada etapa del proceso se llevara a cabo bajo los “más altos estándares de integridad y transparencia”.
Sobre la tarea a su cargo, reconoció la labor del personal electoral y de cada ciudadano que colaboró, pues sostuvo que la organización de una jornada de la magnitud y con los “desafíos, operativos, técnicos y humanos” sólo pudieron superarse con una planificación rigurosa.
“Cada procedimiento fue cuidadosamente ejecutado para asegurar que los expedientes que hoy se entregan reflejen fielmente la voluntad de la ciudadanía”, dijo.
Agregó que ahora comenzará un nuevo trabajo para el INE, donde se comprometió a perfeccionar y fortalecer lo para continuar garantizando elecciones libres.
Sobre las impugnaciones, mencionó que representan un “pilar primordial” para la democracia con las que se asegura que cualquier duda o discrepancia sea revisada y resuelta conforme a derecho.
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