Abelardo Valenzuela Holguín, titular de la Fiscalía Anticorrupción de Chihuahua (FACH), aseguró que Javier Corral Jurado, exgobernador del estado, es prófugo de la justicia desde la noche del miércoles, luego que la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX) evitó su aprehensión tras negarse a colaborar con la instancia que él encabeza.
“Es (un) prófugo; vamos a ir donde esté. Están obstruyendo a la justicia, lo rescataron a la brava, es algo inusual, increíble, inadmisible. No es rescate, corrijo, fue un impedimento. Se rescata a los héroes, no a los que están imputados en un delito de corrupción”, aseveró el funcionario.
En conferencia de prensa, Valenzuela Holguín acusó que hubo un abuso de autoridad y obstrucción de la justicia por parte de las autoridades de la FGJCDMX al impedir la detención en la capital del país del exgobernador, acusado de peculado.
Añadió que en enero de 2023 la Auditoría Superior del Estado (ASE) presentó una denuncia por los hallazgos de una auditoría forense de la deuda pública, correspondiente a la Cuenta Pública 2021.
De acuerdo con el fiscal, hay antecedentes de colaboración con la CDMX y en esta nueva orden de aprehensión se siguieron todos los protocolos y se entregó la solicitud de colaboración alrededor de las 20:00 horas. Una hora después, dijo, recibieron la autorización por parte de la Fiscalía capitalina, por lo que se dirigieron a ejecutar la orden de aprehensión.
Dijo que la persona que autorizó la intervención de los elementos de la fiscalía de Chihuahua fue Brenda Cruz Ibarra, subdirectora de Control. También mencionó en esta ocasión la Fiscalía le dijo que no contaba con elementos para “la guarda”, pero sí se contaba con la autorización para llevar a cabo la orden judicial.
Precisó que en el momento de la aprehensión de Corral Jurado “de repente” llega el encargado de despacho de la Fiscalía, “acompañado de cerca de más de 100 elementos armados y decidió, sin fundar, ni motivar su informal y espontánea decisión de revocar verbalmente lo que los órganos facultados de su propia Fiscalía habían autorizado previamente y de manera formal y se lleva al hoy imputado”.
El fiscal expuso que, en labores previas de inteligencia, se percataron de que Corral solía estar acompañado de una escolta, posiblemente integrada por miembros del extinto Estado Mayor Presidencial: “Los vehículos que portan son federales. Eran seis elementos, los cuales cercaron al hoy imputado”.
Dijo que cuando la comitiva encargada de efectuar el arresto —conformada por el vicefiscal anticorrupción, el secretario particular, un agente del ministerio público y dos agentes ministeriales— se acercaron a Corral, le leyeron sus derechos y le permitieron el uso de un teléfono celular para hacer las llamadas telefónicas que fueran necesarias: “Quién sabe a quién llamó. Lo que sí es que no tardaron ni 15 minutos en estar súper sitiado el restaurante y nos fue imposible ejecutar con tranquilidad una orden de aprehensión”.
Finalmente narró que de pronto empezaron a llegar muchas personas armadas, “no sabemos de qué corporación, gentes vestidas de negro con armas largas, no traían identificaciones atrás, solamente traían uniforme negro táctico y armas”.
“Documento no faculta a violar soberanía”: Lara
El encargado de despacho de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX), Ulises Lara, negó haber “rescatado” al exgobernador de Chihuahua, Javier Corral, de ser detenido por autoridades de Chihuahua la noche del miércoles en un restaurante de la capital, y advirtió que el documento de colaboración presentado no permitía violentar la soberanía de esta entidad, y de haber procedido, hubiera sido un secuestro.
Añadió que todas estas acciones que desarrolló la dependencia fueron realizadas bajo las atribuciones que le confieren la Constitución federal, de la CDMX y la Ley Orgánica de la FGJ.
“Bajo ninguna circunstancia se trató de un rescate, como equivocada y dolosamente se ha señalado. Cumplimos estrictamente la ley como nos fue conferida. Sólo se trataba de un documento interno que, bajo ninguna circunstancia, les faculta a irrumpir en una entidad foránea y, con ello, violentar su soberanía, y mucho menos a cumplimentar un mandamiento judicial”, dijo.
Añadió que en el miércoles recibió una llamada telefónica del equipo de Corral, en la que le notificaron que elementos de la Policía de Investigación de la Fiscalía Anticorrupción de Chihuahua querían “privarlo de su libertad bajo el argumento del cumplimiento de una orden judicial”.
“Pude confirmar que se buscaba llevar a cabo la diligencia, al amparo de un oficio interno de fecha 14 de agosto de 2024, mismo que no corresponde a una aceptación de la colaboración, ya que solamente forma parte de las gestiones que esta Fiscalía lleva a cabo para su atención, conforme a los plazos establecidos en la Constitución, el Código Nacional de Procedimientos Penales y acuerdos de colaboración en la materia”, precisó Lara López.
Agregó que, por propia voluntad, Javier Corral decidió acompañarlo, con la finalidad de aclarar su situación jurídica, a las oficinas de la Fiscalía capitalina, de donde se retiró por su propio pie, al no contar la institución capitalina con algún documento o mandamiento judicial que ordenara su detención.
“Es importante mencionar que el oficio citado fue recibido por la Dirección General de Atención y de Cumplimientos de Ordenamientos Judiciales a las 20:16 horas, es decir, sólo unos minutos antes de que se buscara ejecutar el mandamiento judicial, por lo que aún se encontraba en proceso de atención, sin una respuesta oficial”, concluyó.
PIDEN RENUNCIA. La bancada del PAN en el Congreso capitalino exigió la renuncia inmediata del encargado de despacho de la FGJCDMX, Ulises Lara, por no permitir la aprehensión de Javier Corral.
“La actuación de Ulises Lara, al acudir personalmente a liberar al presunto delincuente de Javier Corral, confirmó que la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México es un apéndice de los gobiernos morenistas que actúa de manera sesgada para proteger a los funcionarios y amigos de la 4T y no como una institución autónoma encargada de la procuración de justicia en la capital”, detalló.
Exgobernador acusa una persecución en su contra
Javier Corral, exgobernador de Chihuahua y senador electo, negó tener relación con el presunto desvío de 98 millones de pesos para solventar la deuda pública del estado que gobernó, e insistió en que “es una persecución de la gobernadora Maru Campos”, además, aseguró que ya se amparó ante la orden de aprehensión, además de denunciar “abusos de autoridad y privación ilegal de la libertad” al intentar detenerlo “arteramente”.
“He presentado una denuncia en contra de la gobernadora de Chihuahua, María Eugenia Campos Galván, del titular de la Fiscalía Anticorrupción estatal, Luis Abelardo Valenzuela Holguin, y/o quien o quienes resulten responsables por haber ordenado y ejecutado conductas posiblemente constitutivas de los delitos de abuso de autoridad, privación ilegal de la libertad en grado de tentativa y lo que resulte”, dijo.
En un comunicado difundido en redes sociales añadió que las autoridades de Chihuahua buscaron detenerlo “artera y arbitrariamente, fuera de todo cauce legal”, pues, aseguró, no contaban con la autorización prevista en el Convenio de Colaboración celebrado entre las fiscalías del país.
“En virtud de que cualquier detención por autoridades ajenas a la Ciudad de México sin la autorización correspondiente es una privación ilegal de la libertad, y para interrumpir la comisión de los delitos en mi contra que estaba teniendo lugar, personal de la Fiscalía de la Ciudad de México intervino para salvaguardar mi integridad física, libertad y derechos. Reconozco el actuar conforme a derecho de las autoridades de esta ciudad”, señaló.
Corral afirmó que no ha cometido delito alguno y si así lo demostraran, se le debe permitir defenderse en libertad, como es su derecho, y que si en Chihuahua las instituciones del sistema de justicia “no estuvieran cooptadas por la gobernadora, quien a su vez se encuentra sometida bajo control y chantaje de César Duarte Jáquez y Manlio Fabio Beltrones. Queda claro que esto se trata de una persecución política en mi contra, se me acusa de corrupción por haberla combatido”.
Por venganza, intento de captura, dice AMLO
El Presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que la intención de la captura de Javier Corral, exgobernador de Chihuahua, es por las “diferencias políticas de tiempo atrás” con políticos de su estado, lo que significa una “venganza” en su contra.
“Esto tiene que ver con diferencias políticas que vienen de tiempo atrás. La actual gobernadora se alió al exgobernador (César) Duarte; aunque son de partidos distintos, pues es parte de la promiscuidad política, ¿no?, de los últimos tiempos, de cómo se empezaron a unir el PRI y el PAN”, afirmó.
En la conferencia matutina, sostuvo que Maru Campos y Duarte se unieron contra Corral Jurado porque fue quien promovió las acusaciones en contra del expriista, quien se fue a Estados Unidos donde lo detuvieron, extraditaron a Chihuahua y lo liberaron.
“Es una especie de venganza, porque yo no les voy a hablar de la cuestión legal, eso pídanle, como dicen algunos medios, opinión a los expertos; yo les voy a hablar de la realidad política, porque lo otro es lo que llaman: ‘La ley es la ley’, cuando les conviene”, manifestó.
Agentes de la Fiscalía Anticorrupción de Chihuahua intentaron detener el miércoles por la noche al exgobernador Corral Jurado, en un restaurante de la colonia Roma, de la Ciudad de México. Sin embargo, personal de la Fiscalía capitalina, incluyendo a su encargado de despacho, Ulises Lara, acudió para evitar la captura.
En el caso de la fallida aprehensión del exmandatario, el Presidente expuso que si no había un procedimiento, no pueden venir policías judiciales de ningún estado a detener a alguien aquí sin llevarlo a cabo con la colaboración de la fiscalía o procuraduría, en este caso, de la Ciudad de México.
Asimismo, expresó su sorpresa de que algunos medios de comunicación hayan transmitido este operativo en vivo.
“Pero no sabía yo que ahora, al mismo tiempo, estaban transmitiendo, que tenían información, pues. Lo que se informó en la mañana es que, sin informarles, sin decirle nada a la procuraduría de la Ciudad de México, policías judiciales de Chihuahua quisieron detenerlo, a Corral”, acusó.
Recordó que lo mismo ocurrió cuando fue capturado el dirigente de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO), Flavio Sosa, cuando Genaro García Luna estaba en la Policía Federal.
“Hacen todo un despliegue de medios ahí, en vivo, como si hubiesen tomado preso a un delincuente muy peligroso, y van narrando en vivo. Era un poco la costumbre”, aseveró.
Más adelante, rememoró que desde el gobierno de Carlos Salinas existe la alianza PRI y PAN, ya que tenían “concertacesiones (en las que) no le aplicaban todo el acelerador del fraude y les permitían ganar. Fue lo que sucedió en Baja California con el primer gobernador del PAN, Ernesto Guillermo Ruffo Appel”.
Explicó que ese mismo día del triunfo de Ruffo, hubo elecciones en Michoacán para gobernador, “nada más que Salinas no nos quería y no nos veía como adversarios a vencer, sino como enemigos a destruir, y en el caso de Michoacán lo que hubo fue una gran represión y un gran fraude”.
Únete a nuestro canal de WhatsApp. En La Razón enviamos a tu celular lo más importante México y el Mundo, recuerda que una persona informada siempre tiene La Razón.
LMCT