Osiel Cárdenas Guillén, exlíder del Cártel del Golfo, dejó la prisión de Terre Haute, en Indiana, la mañana de este viernes tras obtener su libertad.
De acuerdo con los registros de la Agencia Federal de Prisiones de Estados Unidos el estatus legal del capo aparece como “libre”; además, el Buró Federal de Prisiones modificó la fecha de liberación de Osiel Cárdenas Guillén a “desconocida”.
Informes de ese país, señalan que el narcotraficante fue tomado en custodia por el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE por sus siglas en inglés), y se espera que se mantenga así hasta tener una determinación final.
De esta forma, en caso de que se dicte su liberación total, el ICE podría iniciar su proceso de deportación a México como ha sucedido en diversos casos, aunque aún no se ha determinado que esto vaya a suceder de esa manera.
El narcotraficante fue detenido el 14 de marzo de 2003 en el municipio de Matamoros, Tamaulipas, y en 2007 fue extraditado hacia Estados Unidos, donde fue declarado culpable por narcotráfico, lavado de dinero y por amenazas a agentes federales.
Además, se le vinculó de comandar un imperio criminal que trasladó cientos de toneladas de droga al vecino del norte, mismas que le generaron ganancias millonarias; además de ser uno de los principales generadores de violencia en la frontera de ambos países.
De esta manera, la jueza Hilga Tagle de Texas lo sentenció a 25 años y un pago de 50 millones de dólares; sin embargo, fue liberado cuatro años antes por buen comportamiento, y se le tomó en cuenta el tiempo que estuvo preso en México.
En México, el capo está acusado de crimen organizado y narcotráfico, por ello, en caso de deportación, podría ser detenido por autoridades mexicanas.
Cárdenas Guillén fue considerado a inicios del segundo milenio como uno de los capos más importantes y poderosos del país, pues tenía a su cargo a al menos 300 personas sólo para seguridad, lo que movió en esos momentos a las autoridades mexicanas para lograr su arresto; además, también es reconocido por crear a uno de los grupos criminales que ha desatado mayor violencia en México, Los Zetas, mismo que provienen de las fuerzas militares, pero que se corrompieron para después formar el grupo de élite, que fue en los años 90 el brazo armado del Cártel del Golfo.
Por esa razón, desde Estados Unidos se le veía como un jefe criminal “extremadamente violento”; incluso, se le atribuyó el intento de secuestro de un agente de la DEA en 1999, así como de un agente del FBI que estaba encubierto en México.
Osiel Cárdenas también amenazó a un agente en Texas, quien le obstaculizó el paso de una tonelada de marihuana.
Con este panorama, y debido a su extensa red para traficar estupefacientes al vecino del norte, se menciona que en su mejor momento logró introducir al país norteamericano hasta seis toneladas de cocaína de manera mensual, principalmente en ciudades como Atlanta o Houston, donde llegó a ganar en pocos meses hasta 40 millones de dólares.
Un documento de la Corte Federal de Distrito Sur de Texas, con fecha 24 de febrero de 2010 determinó que cuando saliera de la cárcel, debía cumplir con una libertad supervisada de cinco años.
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FGR