Tras las declaraciones de Felipe Calderón, de que en México el Estado es gobernado por el crimen organizado, Andrés Manuel López Obrador afirmó que el exmandatario “está desquiciado, haciendo el ridículo” y es hipócrita, ya que durante su administración se concretó un “narcogobierno”.
El Presidente ejemplificó que fue en el gobierno del panista en el cual el secretario de Seguridad, Genaro García Luna, estableció relaciones de complicidad con los grupos criminales, en especial el Cártel de Sinaloa, para configurarse un “narco-Estado”.
Acusó a Calderón de ser partidario del conservadurismo, “seguidor de Iturbide, porfirista y anticardenista. Por eso se fue a Madrid con su amigo (José María) Aznar y con todo el grupo de derecha de España, de Europa y de América Latina”.
Opinó que Calderón es un “hipócrita”, con pensamiento conservador, como muchos de la clase alta y media, ya que, dijo, son quienes “van a la iglesia los domingos, confiesan, comulgan para dejar el marcador en cero y regresan porque siguen pecando, sobre todo cometiendo pecados sociales, humillando a sus semejantes, robando, mintiendo y van de nuevo ‘por mi culpa, por mi culpa y por mi grande culpa’”.
El mandatario lanzó un decálogo de preguntas al exmandatario por el caso de García Luna, porque los mexicanos merecen una explicación de sus vínculos con el crimen organizado.
Entre algunos cuestionamientos mencionó: “¿cómo conociste a García Luna?; ¿por qué tomaste la decisión de nombrarlo secretario de Seguridad Pública?; ¿conocías todos sus antecedentes, sabías que había iniciado su carrera policiaca como miembro del Cisen en el gobierno de Salinas?”.
Más adelante, aseguró que la solicitud de la defensa de García Luna para condenarlo a 20 años de cárcel, es muestra de su culpabilidad en delitos de narcotráfico y operaciones con recursos ilícitos.
“Si su abogado está planteando 20 años, está aceptando que sí hay culpabilidad”, afirmó, tras señalar que su gobierno esperará la sentencia programada para el 9 de octubre.
Reiteró que este caso afecta tanto a México como a Estados Unidos, dado el manejo del dinero y las actividades delictivas que involucran a ambos países.