Los destrozos realizados durante la marcha por el décimo aniversario de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa dejaron daños en 40 negocios de la capital, que ascienden a 34 millones de pesos, reportó la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo de la Ciudad de México (Canaco CDMX).
Adicionalmente, el organismo estimó que más de 7 mil establecimientos se vieron afectados en sus ingresos, por lo que aunado a las pérdidas materiales, se estima un impacto económico de 21 millones de pesos por las ventas no realizadas.
El presidente de la Canaco CDMX, José de Jesús Rodríguez Cárdenas, lamentó que a la manifestación por la exigencia de justicia para los jóvenes desaparecidos en Iguala, Guerrero, el 26 de septiembre de 2014, se hayan infiltrado grupos vandálicos “que no vacilaron en destruir establecimientos comerciales, arrojar artefactos explosivos y saquear tiendas”.
“Es razonable la protesta pública por parte de los padres de los estudiantes desaparecidos, pues se trata de una expresión ciudadana que respetamos y compartimos, por lo que exhortamos respetuosamente a las autoridades del nuevo Gobierno mexicano para que realicen la investigación del caso, que permita a las familias de los normalistas desaparecidos acceder a la justicia y terminar con años de dolor”, dijo.
En este sentido, el presidente de la Canaco señaló que es desafortunado que estos grupos de “provocadores y delincuentes disfrazados de anarquistas que, bajo el cobijo que da el anonimato” causarán daños a negocios, afectando el patrimonio ajeno, y que la policía no pudo ni intentó detenerlos.
Aseguró que el organismo no está en contra de “las manifestaciones pacíficas que exigen justicia”, por lo que hizo un llamado a las autoridades capitalinas a hacer valer el Estado de derecho y no tolerar actos vandálicos con el pretexto de protestas sociales, que sólo ponen en peligro la integridad de las personas, los negocios, el mobiliario urbano y el patrimonio histórico de la Ciudad de México.
