La dirigencia nacional del PRI y las bancadas en las cámaras de diputados y senadores acordaron no asistir a las sesiones del domingo, para no convalidar la militarización y porque, dijeron, en el oficialismo se carece de voluntad política para atender la violencia e inseguridad.
En un comunicado, Alejandro Moreno, presidente del Comité Ejecutivo Nacional, y los líderes en el Senado, Manuel Añorve, y Cámara de Diputados, Rubén Moreira, determinaron ausentarse de las sesiones donde se declarará la constitucionalidad de la reforma por la que la Guardia Nacional se adscribe a la Secretaría de la Defensa Nacional.
Lo anterior, dijeron, en congruencia con la postura del PRI expuesta en ambas cámaras, toda vez que la reforma no resuelve los temas de seguridad y, además, no se atendió en estos años la necesidad de fortalecer las policías estatales y municipales.
Al destacar que los 36 diputados federales y los 15 senadores del partido votaron en contra de la reforma, establecieron que el PRI no respaldará la militarización asistiendo a las sesiones del 29 de septiembre.
"Alito" Moreno, Añorve y Moreira opinaron que con la adscripción de la Guardia a la Sedena se envía al mundo el mensaje de que México es incapaz de mantener la seguridad sin recurrir a la militarización permanente, debido a que sus instituciones civiles son tan débiles, que deben entregar el control militar.
Previamente las bancadas del PAN y Movimiento Ciudadano en ambas cámaras legislativas anunciaron también que se ausentarán de dichas sesiones, por estar en contra de que la GN sea adscrita a la Sedena, al considerar que es un paso más a la militarización en México.
JVR