Sólo 17 de cada 100 mexicanos tienen un seguro

Cuesta hasta $500 mil un servicio funerario en 2024

Expertos señalan a La Razón que gastos luctuosos dependen mucho de qué tan preparada estaba una persona al morirse; destacan que la cultura de ahorro para estas situaciones es nula

Una mujer durante la visita a la tumba de un ser querido, ayer.
Una mujer durante la visita a la tumba de un ser querido, ayer.

La muerte es algo de lo que nadie tiene la certeza de cuándo va a ocurrir, pero lo que sí se puede hacer es prevenir cómo queremos que sea nuestro funeral y cuánto pagar por él; sin embargo, la planeación y la contratación anticipada de los servicios funerarios son un tema que pocas personas suelen abordar y es ante la falta de preparación que el costo de morirse en México puede ir desde los 20 mil hasta los 500 mil pesos.

En entrevista con La Razón, Carlos Islas Murguía, director de la institución financiera LIMRA para México y Centroamérica, explicó que los costos de los servicios funerarios dependen mucho de qué tan preparada estaba una persona a la hora de su muerte, pues al fallecer un ser querido se tiene que hacer la elección de la funeraria, la tanatopraxia (preparación del cuerpo), el traslado al panteón y la compra de un espacio en el mismo.

Esto, dijo, y otros detalles como el tipo de ataúd, si la lápida es de mármol o de piedra o si una persona va a ser cremada, elevan o reducen el precio de dar sepultura a un ser querido; además, otro factor importante que influirá en el precio final de un servicio funerario son los abusos por parte de los proveedores, pues en un momento de dolor y vulnerabilidad, las personas pueden estar más inclinadas a aceptar paquetes innecesarios o pagar precios exorbitantes.

“Digamos que 24 por ciento de la población gasta alrededor de 20 mil pesos para poder hacer frente a los últimos gastos funerarios y esta cantidad puede irse fácilmente hasta los 300 mil 500 mil pesos. Esto dependerá de la calidad de los servicios que adquieras; será mucho peor o estás más expuesta al abuso de los servidores cuando no estás preparada… Estás en un arresto afectivo que te impide tomar buenas decisiones y esta gente, como buitres lo entienden perfecto, a ellos les importa ganar una comisión”, dijo.

Al final sólo nos queda reflexionar a partir de las muy mexicanas tradiciones del Día de Muertos que la vida tiene sentido porque algún día nos vamos a morir, ahorremos para ello o no
Fernando Plascencia, Profesor de la Universidad de Ags.

Ante el riesgo de morirse imprevistamente ya sea porque enfermaste de una enfermedad grave o sufriste un accidente, radica la importancia de contratar un seguro que cubra los costos de este proceso natural, pero, irónicamente “aunque los mexicanos veneran tanto a la muerte, siguen teniendo miedo de hablar de manera real de ella y, de ese modo, evitan hacer inversiones en gastos funerarios, esto por el miedo a enfrentarla”, señaló Mario Alberto Carrillo, tanatólogo y director del Centro Académico y Psicológico de Educación para el Desarrollo (Caped).

Aseguró que el ser humano es la única especie viva que tiene certeza de que va a morir y aun así “sienten que nunca va a ocurrir por lo que no hay una prevención, no puedes prevenir algo que piensas que no va a suceder, por ello se deja todo para el momento en el que el ser querido se va y la familia ve cómo organiza el gasto”.

“Ese temor y darte cuenta de que la muerte está ahí presente, el mexicano la celebra, la evoca y hasta la vive o imagina cómo es la muerte, pero no quieren verse en ello, nadie quiere ver a su familia enfrentando esto, el mexicano gasta en celebrar a la muerte pero no gasta en prevenirla”, destacó.

El tanatólogo mencionó que los mexicanos no tienden a ser previsores, desde el hecho de no llegar puntuales a las reuniones, de no aceptar las pérdidas o culpabilizar a alguien más por los propios actos, todos esos elementos hacen que sea una sociedad que niega constantemente la muerte.

En este sentido, Fernando Plascencia Martínez, profesor investigador del Departamento de Sociología de la Universidad de Aguascalientes, mencionó a La Razón que “en nuestra tradición simbólicamente negamos a la muerte, y los ritos para dar sepultura y despedir a las personas son actos que aminoran el dolor”.

Indicó que en México es común escuchar que se dice que la única muerte es el olvido, por ello ante la fuerza de la conmemoración del Día de Muertos y que exista una falta de prevención en estos temas, sobre todo en el ámbito económico, el investigador se cuestiona: “¿si la muerte es lo único certero que tenemos, por qué no hay ahorro o cultura de prevención?”.

“Si no simbolizáramos a la muerte y no la hiciéramos amable, a través de tantos ritos en México, nos volveríamos locos, porque la única certeza que tenemos en la vida es que vamos a morir; por eso la llenamos de sentido”, señaló.

La negación de la muerte como una función biológica y su falta de planeación para los gastos previo a llegar a ella, para el diplomático no es tanto biológica sino cultural. “Es sanísimo celebrar y burlarnos de la muerte, y es que al final sólo nos queda reflexionar a partir de las muy mexicanas tradiciones del Día de Muertos, que la vida tiene sentido porque algún día nos vamos a morir, ahorremos para ello o no”.

Ante esto, Carlos Islas apuntó que aunque la conciencia del seguro en nuestro país ha aumentado entre 15 y 30 por ciento a raíz de la pandemia porque los mexicanos se dieron cuenta “cuán fácil era perder la salud, la vida y el patrimonio, lastimosamente hoy en día sólo 17 de cada 100 personas en México está asegurada” y muchas de ellas probablemente no lo saben.