Los Ambystoma mexicanum mejor conocidos como ajolotes, son una especie endémica de México, anfibio vertebrado, con una cabeza redonda y un par de ojos sin párpados que durante años se han robado el corazón de miles de personas en México y el mundo.
Su curiosa forma parecida a una salamandra lo hacen un animalito bastante popular a lo largo del planeta, sin embargo, no es nada más por eso que generan interés, sino también por sus capacidades de regeneración y su singular condición de conservar características larvales en su vida adulta.
Sin embargo, debido a la destrucción de su hábitat natural que son los canales de Xochimilco, así como la presencia de especies invasoras han logrado reducir su población de manera significativa poniéndolos como una especia en peligro de extinción.
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¿Qué comen los ajolotes?
La mayoría de las personas suelen pensar por su tierna cara que es un animal herbívoro, pero en realidad, este pequeño anfibio es carnívoro, se alimenta de animales más pequeños que él como peces pequeños, gusanos, babosas, caracoles e insectos variados.
Estando en cautiverio, los ajolotes suelen ser alimentados por peces, lombrices e inclusive larvas de mosquitos. En su hábitat natural, se guían del olfato para cazar a sus presas.
Se tiene registro de que inclusive suele satisfacer su apetito con otros ajolotes.
¿Se extinguirá en 2025?
La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) anunció que para 2025 la especie podía desaparecer por completo, quedando solo en el recuerdo de los billetes de 50 pesos.
Y es que a través de un estudio se reveló que la población de estos anfibios había disminuido de manera drástica debido a la contaminación del hábitat natural, el aumento de la temperatura de los canales donde habita, así como por la introducción de especies invasoras.
Para el año de 1998 se llegó a contabilizar hasta seis mil ejemplares en los canales de Xochimilco, pero para el año 2013 la cifra había caído de forma extrema a tan solo 36 individuos.
Por esta y otras razones, a través de modelos matemáticos, la UNAM prevé la desaparición completa de los ajolotes para el 2025.
Con el fin de preservar la especie, especialistas de la UNAM se encuentran realizando investigaciones sobre su capacidad de regeneración en los órganos reproductores.
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LMCT
