En Colima, el estado en donde “antes no pasaba nada”, fue asesinado ayer el contraalmirante de la Armada, Fernando Rubén Guerrero Alcántar, cuando se trasladaba en su camioneta por calles del puerto de Manzanillo. La Secretaría de Marina lamentó “profundamente” el fallecimiento de uno de sus altos mandos, quien estaba comisionado en este lugar. A Guerrero Alcántar le fue arrebatada la vida a plena luz del día, a las 11:30 horas, algo que sólo fue posible debido a las omisiones de las autoridades estatales y municipales en cuanto a su obligación de generar condiciones de seguridad. Apenas el martes de la semana pasada, dos elementos del mismo instituto armado fueron atacados a balazos en el mismo puerto, tras lo cual uno de ellos perdió la vida. Después del crimen de ayer, la gobernadora Indira Vizcaíno apareció en sus redes sociales, pero para presumir una “noche llena de baile” con Banda Maguey y Mi Banda el Mexicano. De la violencia creciente en la entidad, nada. Uf.