Con un avanzado equipo de rayos X, la Secretaría de Marina (Semar) revisa cada uno de los 3.7 millones de contenedores que arriban al Sistema Portuario de Manzanillo, con el objetivo de detectar posibles cargamentos ilícitos.
En 2023, 3.7 millones de contenedores pasaron por el puerto de Manzanillo, Colima; sin embargo, se espera que para 2024 el número aumente a 3.9 millones.
La carga ilícita más recurrente son drogas como, cocaína y metanfetamina; además de otro tipo de compuestos como el mercurio, que, de acuerdo con la institución, se usa para la minería ilegal.
Pese a que cada embarque se revisa, se pone mayor atención en los que provienen de Sudamérica, en específico los de Brasil y Ecuador.
De esta manera, una vez que llega el embargue, se parquea en un lugar específico de una zona de grúas, donde, después de bajarla y colocarla en camiones tipo tráiler, pasa por la detección de rayos X, que es coordinada por una unidad de la Marina que cuenta con el equipo especializado para detectar cualquier carga ilícita.
La experiencia de los marinos, es clave para la detección de los narcóticos, ya que son distintos a los artículos cotidianos. De esa manera, una vez que se descubran, de inmediato se asegura la carga y se da aviso a la embarcadora, además que los artículos se ponen a disposición de las autoridades correspondientes.
De acuerdo con la Marina, la geografía del puerto de Manzanillo es sumamente importante para el desarrollo del país, ya que por su ubicación con Sudamérica y Asia la hacen estratégica para que los grupos delictivos busquen enviar sus productos, para que puedan ser distribuidos a otros estados del país.
Además, la Semar busca evitar que se generen ilícitos que afecten a la población mexicana, combatiendo el crimen desde los puertos de entrada de mercancías al país.