De película

ROZONES

Rozones Foto: Imagen: La Razón de México

Y resulta que ayer ocurrió algo que sólo se veía en películas o en otras latitudes. Y es que lo que comenzó como un viaje rutinario en el vuelo 3041 de Volaris, con destino a Tijuana, se transformó en una tensa situación de emergencia que puso a prueba protocolos y nervios. Un hombre que viajaba con su esposa e hijos y que aseguró haber actuado así tras recibir una supuesta amenaza de muerte y el aviso del plagio de un familiar, intentó secuestrar y desviar la ruta del avión hacia Estados Unidos. Según se dijo, el hombre usó un lapicero para amagar a una sobrecargo e intentó ingresar a la cabina de pilotos, desatando el caos. Gracias a la rápida actuación de la tripulación y pasajeros, la situación no escaló, el vuelo aterrizó de emergencia en Guadalajara, donde elementos de la Guardia Nacional finalmente detuvieron a Mario “N” tras un forcejeo. Videos en redes sociales muestran la angustia vivida a bordo, con pasajeros sometiendo al agresor mientras se escuchaban gritos y llantos de menores. Aunque se respetaron los protocolos de seguridad, queda la pregunta de cómo prevenir episodios así sin afectar a los pasajeros y sus familias.