Y en donde los delincuentes no descansaron ni para celebrar el Año Nuevo fue en Sinaloa, porque resulta que desde los primeros minutos de este 2025 se presentaron diversos actos de violencia. Además de fuertes balaceras en la madrugada de ayer, 11 personas fueron ejecutadas entre el 31 de diciembre y el 1 de enero. Y Álvaro Andrés Rivera, un conocido empresario de diversión nocturna de Mazatlán, fue secuestrado en momentos en que se disponía a celebrar con su familia el inicio del año. A los observadores no se les escapa el dato de que, cuando el titular de la SSPC, Omar García Harfuch, acude a Sinaloa a coordinar los operativos, disminuye la violencia. Pero apenas se aleja unos días, y los demonios se vuelven a soltar. ¿Entonces en dónde está la falla? Es imposible que Omar radique permanentemente en esa entidad, pues debe atender muchos asuntos de carácter nacional. La responsabilidad es, nos dicen, de las autoridades locales, las cuales, de plano no pueden con el paquete. Uf.
