En su último día como embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar se despidió agradeciendo su paso por este país, sin embargo, también reconoció la producción de fentanilo en este territorio.
“Sé lo que pasa, que hay fentanilo en México y también sé que se produce acá”, afirmó. A pesar de ello, dijo que el debate no debe centrarse en si se produce o no esa sustancia en territorio mexicano, ya que “el problema fundamental no radica en eso; y ese discurso no nos lleva a donde tenemos que ir”.
Ken Salazar pide trabajo bilateral contra el fentanilo
Aseguró que en conjunto Estados Unidos y México “tenemos que trabajar este problema juntos y eso lo hemos hecho. Para mí el fentanilo es problema mundial. Está muriendo gente, se requiere la cooperación y el esfuerzo sí de México y de Estados Unidos, pero también de muchos otros países”.
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También el diplomático expresó su confianza y optimismo en la Presidenta Claudia Sheinbaum y en el titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Omar García Harfuch, a quienes les deseo suerte en su mandato y destacó sus capacidades.
Ken Salazar se a sin entregar informe sobre captura de “El Mayo” Zambada
El originario de Colorado confirmó que se va sin entregar el informe sobre la captura del narcotraficante Ismael “El Mayo” Zambada, cofundador del Cártel de Sinaloa. Éste reporte seguirá los canales legales, dijo.
“El proceso legal sigue con estos capos, seguirá y se verán los resultados en los meses y los años adelante. La esperanza mía siempre ha sido que hay muchos delincuentes, esos no son los únicos que deberían estar pasando su tiempo en Estados Unidos por los crímenes que han causado”, señaló.
Salazar se dijo orgulloso de haber servido en México y aprovechó, además, para anunciar que hasta el día en que llegue el nuevo embajador republicano, Ronald Johnson, al frente de la representación diplomática, permanecerá Mark Coolidge Johnson, quien fue presentado durante una conferencia de prensa.
El diplomático, caracterizado por el uso de sombrero a lo largo de su trayectoria, afirmó: “Yo soy de rancho, campesino. Un día andaba yo en Oaxaca, hace unos años, y me preguntó un campesino con un sombrero como el mío: ‘Me gusta su sombrero, yo tengo mi sombrero, ¿por qué usa usted su sombrero?’ Le pregunté yo a él: ¿Por qué usa usted su sombrero? Y me respondió: ‘Es por mi identidad, por el pueblo de donde vengo’. También yo, en el mismo sentido, el sombrero para mí es parte de mi vida, de mi familia, de mis abuelos, papás, hermanos, hermanas. Desde niño usé sombrero; durante toda mi carrera política siempre lo he tenido”, recordó.
Respecto a la llegada de Donald Trump al gobierno, Ken Salazar dijo que vienen “cambios grandes” en la relación diplomática entre México y su país de origen.
“Hay mucho miedo por algunas de las amenazas que se hacen”, declaró en su última conferencia de prensa, pero dijo estar seguro de que para reparar un sistema de inmigración “quebrantado”, Washington necesitará trabajar mano a mano con el gobierno mexicano y no hacerlo en un solo eje, pues de lo contrario no resultará positivo.
Ken Salazar saldrá de México el próximo miércoles, dejando la embajada y a sus 3 mil 500 empleados, hasta que se concrete el nombramiento de Ronald Johnson como nuevo embajador del gobierno de Donald Trump en México.
A Salazar lo sucederá Johnson, un veterano de la CIA, creyente y fiel seguidor de las políticas publicitadas por Donald Trump desde su campaña electoral. El nuevo embajador fue boina verde durante más de 10 años y trabajará bajo las órdenes de Marco Rubio, el próximo secretario de Estado, quien en distintos momentos ha contrariado a las ideas de izquierda y sus gobiernos.
cehr
