El titular de la Fiscalía General de la República (FGR), Alejandro Gertz Manero, denunció una “especie de conspiración” en Estados Unidos para permitir el ingreso de armamento a territorio mexicano. Señaló que la reciente publicación de un informe del Departamento de Justicia de Estados Unidos reconoce el tráfico de armas de fuego de alto calibre hacia México, y que este informe señala que 74 por ciento de las armas letales aseguradas entre 2017 y 2021 vienen de ese país.
Gertz Manero se refirió al estudio, elaborado por la agencia estadounidense de Alcohol, Tabaco, Armas y Explosivos (ATF), que además concluye que 82 por ciento de las armas recuperadas en México termina en zonas controladas por el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Durante la conferencia matutina del día de ayer, señaló que el documento “es un informe oficial. Esto no se había dado en mucho tiempo y los datos que se están haciendo públicos por parte del Gobierno de Estados Unidos (…) son verdaderamente muy graves”.
Señaló que la fortaleza de los cárteles de las drogas se encuentra en su armamento: “Eso lo sufrimos a diario, y ustedes lo han testificado, todos los esfuerzos que tienen que hacer las Fuerzas Armadas del país para contener esa letalidad.
El informe revela que entran a territorio nacional de manera ilegal, sobre todo, de los estados Arizona, California, Nuevo México y Texas.
“Oficialmente el gobierno de Estados Unidos reconoce que 74 por ciento de esas armas letales, que son las que nos están causando un daño al país, vienen de Estados Unidos”, subrayó Gertz.
Explicó que este informe presentado por la ATF ratifica “todo lo que ha sufrido México por culpa de esta abundancia de armamento de alto nivel, que ha sido una de nuestras luchas fundamentales”.
Señaló además que esto se puede testificar por las acciones que llevan a cabo las fuerzas armadas “y los enfrentamientos que están teniendo en todas partes”, e insistió en que es una cifra “negra” que las armas de alto calibre que ingresan a nuestro país provengan de EU.
“Son armamentos de calibre 50 y para arriba, con una capacidad de fuego que no se había visto nunca”, dijo, tras asegurar que el Gobierno federal ha implementado políticas para impedir la entrada de armamento de alto riesgo al país.
Y cuestionó los sistemas estadounidenses, al decir que “luego de todos los esfuerzos mexicanos para poderle dar seguimiento a las armas que estamos deteniendo aquí, se encuentra con un tope dentro del sistema de EU, en que los sistemas de control que tienen son de un atraso tal que la información que pedimos puede tardar meses en llegar”.
Insistió en que este atraso de información “es toda una especie de conspiración para que se pueda penetrar en México esa cantidad de armamento. Esto es un asunto realmente muy grave”.
Esto, advirtió, “también nos indica que debemos de tener una relación positiva con Estados Unidos para contener el problema, porque es el que genera y multiplica la letalidad de lo que estamos nosotros teniendo que sufrir en México”.
Al respecto, la Presidenta Claudia Sheinbaum apuntó que su Gobierno buscará tener reuniones con la administración de Donald Trump y dialogar sobre el tráfico de armas provenientes del territorio estadounidense.
“Nuestro objetivo es seguir teniendo estas reuniones, porque así como a ellos les preocupa la entrada de estupefacientes a EU desde territorio mexicano, a nosotros nos preocupa y nos ocupa el tema de la entrada de armas a México”.
También sostuvo que “no soltará” la entrega del informe pendiente sobre el caso de Ismael El Mayo Zambada, que fue solicitado al exembajador Ken Salazar antes de culminar su periodo aquí.
“Nosotros no quitamos el dedo del renglón, seguimos haciendo las solicitudes, lo vamos a continuar haciendo; es una facultad soberana de cualquier Estado contestar nuestros apremios en ese sentido, pero no lo vamos a soltar, eso sí, de ninguna manera”, afirmó.
Indicó que las órdenes de captura contra Genaro García Luna en México continúan vigentes: “Tenemos también la solicitud de extradición, que es obligatoria para nosotros, no nada más por el caso de Rápido y Furioso, sino por todo el resto de las conductas ilegales de este individuo”.
Finalmente, agregó que las autoridades estadounidenses tienen conocimiento de ellas y que “responderán cuando ellos consideren que, de acuerdo con sus procesos, haya el momento judicial para poderlo hacer” y advirtió que estas órdenes, “de que están probadas, están probadas”.