El Colegio de la Frontera Norte (Colef) aseguró que seis de cada 10 mexicanos en Estados Unidos con una situación migratoria “no autorizada” son originarios principalmente de 10 estados de la República Mexicana: Veracruz, Guanajuato, Oaxaca, Michoacán, Jalisco, Guerrero, Chiapas, Hidalgo, San Luis Potosí y Puebla. Además, advirtió que alrededor de 4.9 millones de paisanos con esta clasificación están en riesgo de ser deportados.
El doctor José Francisco Barraza, del Colef, señaló que, “de acuerdo con bases de datos oficiales de la Oficina del Censo de Estados Unidos, creció el número de mexicanos en situación no autorizada. En este sentido, nuestras estimaciones arrojan que el número de mexicanos no autorizados y en posible riesgo de deportación desde Estados Unidos asciende a poco más de 4.9 millones de personas”.
Barraza destacó que los estados de México deben estar preparados con políticas que garanticen los derechos humanos y laborales para una calidad de vida para estos mexicanos que se podrían ver afectados en próximos días por las amenazas del presidente Donald Trump.
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El tamaño aproximado de nuestra población de inmigrantes indocumentados requeriría un aumento masivo y costoso en el número de jueces, tribunales y abogados del gobiernoChristopher Kerosky, Abogado migratorio
Asimismo, señaló que en un informe de esta asociación en el que participaron varios de sus colegas, se estimó que siete de cada 10 mexicanos ilegales en Estados Unidos tienen más de 10 años viviendo allá; su vida se ha hecho en aquel país, han formado hogares estadounidenses.
El abogado migratorio colaborador de medios latinos en ese país, Christopher Kerosky, señaló que “Estados Unidos nunca ha deportado a más de medio millón de inmigrantes en un año, y muchos de ellos fueron deportados cuando intentaban ingresar al país; eso es muy costoso para la nación que expulsa y quien recibe, en este caso México y Estados Unidos”.
Señaló que actualmente hay alrededor de 2.5 millones de personas en proceso de deportación y el procedimiento suele tardar entre cinco y siete años. Por lo anterior, dijo que, para repatriar cinco veces ese número, “el tamaño aproximado de nuestra población de inmigrantes indocumentados requeriría un aumento masivo y costoso en el número de jueces, tribunales y abogados del gobierno”.
Aidé Martínez, antropóloga y especialista en movimientos migrantes, afirmó que “México históricamente ha sido un país de trasiego, pero de igual manera de decenas de expulsados, siempre en búsqueda de mejoras de vida” y señaló que para ella es importante que “las políticas migratorias siempre tomen en cuenta el derecho a una calidad de vida”, que justamente es lo que buscan los migrantes al buscar horizonte en otros países.
La mayoría de los migrantes mexicanos construyen, no destruyen; trabajan en la obra. Las mujeres son cuidadoras o trabajan en espacios para la salud; son una fuerza importante de ese paísAidé Martínez, Antropóloga
La especialista dijo que la situación es particularmente preocupante no sólo para México en caso de recibir a migrantes, sino para EU en caso de quedarse sin este sector, pues 72% de las personas no autorizadas para vivir allá se encuentran dentro de la fuerza laboral. “El resto son menores de edad, estudiantes o personas dedicadas a las labores del hogar”.
La especialista, quien retoma datos del estudio hecho por el Colegio de la Frontera Norte, señaló que entre quienes trabajan, lo hacen principalmente en los sectores de construcción y servicios; por tanto, en caso de deportaciones masivas, estos serían los principales sectores económicos afectados en la economía estadounidense.
“La mayoría de los migrantes mexicanos construyen, no destruyen; trabajan en la obra. Las mujeres son cuidadoras o trabajan en espacios para la salud; son una fuerza importante de ese país y, desgraciadamente, esos estados que podrán recibirlos, desde mi perspectiva, no están preparados para darles los salarios que ellos buscan. Hoy en día, dos mil pesos no sirven de mucho; por el contrario, eso sería lo que ellos ganan muchas veces en medio día de su empleo”, dijo.
La maestra destacó que, entre los primeros impactos sociales para los migrantes mexicanos, está la deportación de familias enteras cuya vida se ha desarrollado en Estados Unidos; muchos de ellos ya no tienen parientes en México. Otro factor que menciona es la separación de familias de los hogares mixtos, con principal afectación para los menores de edad, quienes estarían en riesgo de quedar en orfandad.
Zacatecano, primer devuelto en era Trump
Un hombre originario de Guadalupe, Zacatecas, fue deportado en medio de la juramentación del presidente Donald Trump, tras ser detenido al intentar ingresar de manera irregular a Estados Unidos.
El zacatecano intentó cruzar por la garita peatonal de San Ysidro con un documento falso, motivado por la incertidumbre y temor que generaron las nuevas políticas migratorias anunciadas por el mandatario estadounidense.
Sin embargo, se vio frustrado luego de que las autoridades detectaron que el documento era apócrifo. Tras ser arrestado, pasó un día bajo custodia antes de ser deportado esta mañana a través de Tijuana, Baja California.
A su llegada a México, expresó su agradecimiento por el trato recibido por las autoridades locales. Además, reveló que no es la primera vez que busca cruzar hacia aquel país, donde ya había vivido como indocumentado durante una década en el pasado. Aunque las condiciones parecen más difíciles, aseguró que no abandona sus planes de regresar.
Con información de Ulises Soriano
