Ante la incertidumbre que hay por la deportación masiva de migrantes que se alista en Estados Unidos a México y otras nacionalidades, los albergues de Piedras Negras y Saltillo, Coahuila; Tijuana, Baja California, y Matamoros, Tamaulipas, aseguraron que no cuentan con la capacidad humana, física y económica para recibir una oleada migrante, por lo que piden que sean las autoridades federales quienes se encarguen de la crisis que se espera en las siguientes semanas.
Alberto Xicoténcatl, director de la Casa del Migrante en Saltillo, Coahuila, aclaró que los retornos que se están realizando en la frontera son los que ya estaban programados desde la administración anterior en Estados Unidos; sin embargo, aseguró que “hay una zozobra muy grande” porque cientos de personas aún desean solicitar asilo por la aplicación de CBP y, ante ese panorama, piensan quedarse en México a buscar refugio.
“Ahora, su plan, así nos lo han comentado decenas, es que van a buscar refugio en México, ya que entienden que ya no van a pasar a Estados Unidos. En dos días ya manifestaron 50 personas que desean ya no avanzar y quedarse en el país”, explicó.
Alejandro Gallegos, periodista asesinado en Tabasco, no contaba con mecanismo de protección de Segob
(…) Van a buscar refugio en México, ya que entienden que ya no van a pasar a Estados Unidos. En dos días ya manifestaron 50 personas que desean ya no avanzar y quedarse en el paísAlberto Xicoténcatl, Director de la Casa del Migrante en Saltillo, Coahuila
Señaló que, en meses anteriores, sólo ocho personas habían manifestado su intención de quedarse en México, pero como la situación ya cambió, ahora ellos también cambiaron de parecer, pese a que están a un costado de la frontera.
El activista comentó que, ante la oleada de gente que busca quedarse, ahora ellos están tomando previsiones para apoyar legalmente a quien quiera tramitar su refugio, pero sólo de manera temporal, pues no tienen capacidad para mucha gente en caso de que decenas deseen hacer lo mismo.
“No nos da la vida para tenerlos aquí, no tenemos recursos para contratar personal o dinero para alimentos. Nuestra estrategia es apoyarlos de manera legal para su trámite de refugio y que después se encarguen las autoridades federales. No tenemos la capacidad humana, económica o física para poder sostener a la gente en demasía, estamos rebasados”, señaló.
Afirmó que las autoridades del municipio y del estado no se han acercado a ellos, pues aseguró que no van a tomar en cuenta a la sociedad civil, sino que cada uno por separado hará sus esfuerzos para atender a la gente mexicana que llega y a los extranjeros varados.
Hay muchos extranjeros varados que se empeñan en cruzar a Estados Unidos, pero que no van a poder hacerlo ya que ya no hay asiloFrancisco Gallardo López, Sacerdote de Tamaulipas
Mencionó que la crisis humanitaria se va a recrudecer al paso de los meses, pues la frontera norte va a ser un “tapón” de la gente repatriada de Estados Unidos, quienes permanecen en los estados del norte y los que llegan del sur, lo que también puede generar una crisis de alimentos y salud, ya que, por el clima, están aumentando los casos de enfermedades respiratorias.
Según informes de los albergues, las autoridades federales alistan refugios en Sabinas y Nueva Rosita, Coahuila; Reynosa, Tamaulipas; y Mexicali, Baja California, hasta el momento.
Por separado, el sacerdote Francisco Gallardo López, secretario ejecutivo de la Pastoral de Movilidad Humana en Matamoros, Tamaulipas, explicó a La Razón que hay un escenario de “tensa calma”, pues si bien siguen las deportaciones diarias de 40 personas, aún no se tienen las grandes masas.
“Nosotros esperamos que no suban mucho, porque vamos a estar apretados en los albergues, si es que se desborda la migración. Hay muchos extranjeros varados que se empeñan en cruzar a Estados Unidos, pero que no van a poder hacerlo ya que ya no hay asilo”, indicó.
No tenemos mucho espacio, las autoridades no nos toman en cuenta y tememos que haya un desborde, pues de ser así no vamos a poder dar mucha atenciónJosé María García, Director del albergue Juventud 2000 en Tijuana, Baja California
Agregó que, como Iglesia Católica, se alistan para recibir personas, “pero no muchas”, ya que, en la medida de lo posible, van a apoyar, hasta donde puedan. Además, comentó que el “alivio” son los albergues que se van a montar, pues despresurizarán la atención, pero la preocupación es de los extranjeros que tal vez se queden sin atención.
Adelantó que “no saben” qué pasará, pues han buscado informes sobre la situación, pero nadie les responde. “Nos haremos cargo de algunos mexicanos y extranjeros, pero no en demasía”.
Isabel Turcios, directora de Casa del Migrante en Piedras Negras, Coahuila, dijo que han tenido un aumento de migrantes en la última semana, pero aclaró que son los que vienen directamente de las caravanas de Chiapas y que esperan una oportunidad de cruce.
Señaló que, a pesar de que aún no saben cuándo empiezan las deportaciones masivas, se alistan con espacios para ofrecer atención a la gente que lo requiera, pero hasta cierto punto, ya que no cuentan con la infraestructura para dar más cobijo. “Estamos en coordinación con la Diócesis de acá para atender lo que podamos, pero si es mucho, no vamos a poder”, dijo.
Por su parte, José María García, director del albergue Juventud 2000 en Tijuana, Baja California, aseguró que la localidad es uno de los puntos donde esperan más llegada de migrantes, aunque aclaró que, si bien tienen las puertas abiertas para dar atención, no se darán abasto en caso de una oleada mayor. “No tenemos mucho espacio, las autoridades no nos toman en cuenta y tememos que haya un desborde, pues de ser así no vamos a poder dar mucha atención”, agregó.
Denuncian arrestos ilegales
Funcionarios de Newark, Nueva Jersey, criticaron lo que, según dijeron, fueron arrestos ilegales por parte de agentes de inmigración federales en un negocio local.
En conferencia, el alcalde de Newark, Ras Baraka, dijo que funcionarios del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) se presentaron en el negocio el jueves y detuvieron a tres “residentes indocumentados”, así como a algunos ciudadanos estadounidenses. Señaló que una persona fue interrogada incluso después de mostrar una identificación militar.
“Cuando recibí esta información, me horroricé, me molesté, me enojé de que esto sucediera aquí, en este estado, en este país. Vamos a luchar por todos nuestros residentes en esta ciudad, sin importar cómo se vea eso para nosotros”, aseveró Baraka, un demócrata que busca la nominación de su partido para gobernador.
El ICE describió lo ocurrido el jueves como una “operación de cumplimiento dirigida” y dijo que los agentes pueden pedir identificación a otras personas cuando están realizando “trabajo de campo”.
“El Servicio de Control de Inmigración y Aduanas puede encontrarse con ciudadanos estadounidenses mientras realiza trabajo de campo y puede solicitar identificación para establecer la identidad de un individuo como fue el caso durante una operación de cumplimiento dirigida en un lugar de trabajo... en Newark, Nueva Jersey”, señaló la agencia en un comunicado.