Vaya oso el que hizo ayer el senador Miguel Ángel Yunes Márquez, al tratar de dar un madruguete con el retiro de su intención de afiliación a Morena, a sabiendas de que en realidad ocurriría lo contrario: sería oficialmente rechazado por el partido guinda. No se había terminado de leer el anuncio de Yunes sobre las “buenas intenciones” que lo llevaron a “arrepentirse” de pertenecer al partido en el poder, cuando salió el comunicado de la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia, en donde se establece que Yunes no fue aceptado por la sencilla razón de que, según los registros del INE y sus propias declaraciones, sigue afiliado al PAN. Pero lo que no tiene desperdicio es el cuarto párrafo del comunicado, que dice: “La CNHJ refrenda su compromiso con las y los protagonistas del cambio verdadero”. ¿Habrá entendido lo que le quisieron decir? Queda claro que la 4T ya no está dispuesta a pagar más facturas a los Yunes por los favores recibidos. Uf.

