Los gobernadores de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, y de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, defendieron los nuevos libros de texto y pidieron no destruirlos ni hacer caso a las críticas que desde la oposición se han lanzado.
Ramírez Bedolla calificó como “aberrante” la “andanada de ataques” ante la cual instó a permanecer “firmes” para defender la educación gratuita, laica, científica y universal.
“En la época de la Santa Inquisición, del nazismo, fascismo quemaban los libros que porque los habían escrito los judíos. Eso es racismo, es racista quemar un libro, es ignorancia porque lo han dicho los dirigentes partidistas a nivel nacional y local. Bueno, Marko Cortés dijo que habría que arrancar las hojas que no nos gustaran y quemarlas. ¿No quemaron a Juana de Arco? Están proponiendo en su conservadurismo los libros a la hoguera, como a las primeras mujeres libertarias”, dijo.
En tanto, Rocha Moya exhortó a los padres de familia confiar en los nuevos libros y los maestros, quienes dijo impartirán los diversos contenidos que han sido motivo de polémica, con responsabilidad.
“No crean en esas cosas que se hablan, de que el libro de texto trae cosas que no deben ver las niñas y los niños. A ver, ¿qué debe de hacer la escuela? preparar a las niñas y a los niños, a nosotros viejos, de la pornografía que circulan las redes sociales, que cuando vean eso pues sepan que no lo deben ver, pero para eso se necesita educar en sexualidad y en reproducción”, argumentó.
El mandatario habló de las críticas que ha habido contra los textos en que se aborda la diversidad sexual, y manifestó que no debe de “espantar” hablar de ello y que a los hijos se les debe aceptar y querer a pesar de los “problemas de género” que tengan.
“Que no nos espante yo les digo que, si creen en Dios, cualquier religión que sea, testigo de Jehová, católicos, piensen que cuando lo mandan a un hijo discapacitado o un hijo con problemas de género es una prueba que los mandan para ver si somos capaces como padres de querer tanto a ese hijo como al otro”, dijo.