Los gobiernos federal y de la Ciudad de México advirtieron que serán castigados los actos de influyentismo y de quienes buscan “brincar la fila” para ser vacunados por Covid-19 cuando no les corresponde, como sucedió en hospitales del Estado de México y de la capital del país.
Tras ordenar una investigación sobre una denuncia en el hospital de Rayón, Estado de México, administrado por la Secretaría de la Defensa, el Presidente Andrés Manuel López Obrador confirmó que hubo abuso de poder, lo cual, dijo, “resulta inmoral” y debe haber sanciones para las personas responsables.
De acuerdo con la queja, el director del Hospital Adolfo López Mateos, del Estado de México, José Rogel Romero, su esposa e hijas fueron vacunados contra el coronavirus cuando no les correspondía.
“Se le echaba la culpa al Ejército porque se trataba de personal militar, se hizo la investigación y, en efecto, sí, una familia que no le correspondía la aplicación de la vacuna llegó y con influyentismo se vacunó. Un médico, su esposa, una o dos de sus hijas. Ya se inició la investigación para castigar esta irregularidad, este abuso”, señaló López Obrador.
El gobierno del Estado de México informó que separó a Rogel Romero de su cargo para que lo investiguen las autoridades, informó el vocero de la administración estatal, Jorge Alberto Pérez.
“El doctor José Rogel, director del Centro Médico Adolfo López Mateos, se ha separado del cargo temporalmente para ponerse a disposición de las investigaciones del Órgano Interno de Control y de Contraloría General del Estado de México”, escribió el funcionario mexiquense ayer, en su cuenta de Twitter.
Ante estas circunstancias, el Presidente López Obrador exhortó a la ciudadanía en general a que ayude a denunciar todos estos abusos “porque no es un asunto de un solo servidor público, de una mujer o de un hombre, sino de todos para frenar, detener y cortar de tajo el influyentismo, que es un vicio, un mal hábito.
Tenemos que luchar todos por una sociedad mejor, sin injusticias, sin prepotencia, sin trampas; ayudar y que se sepa que es inmoral. Saltarse o brincarse la fila es una inmoralidad, si no nos correspondeAndrés Manuel López Obrador, Presidente de México
“Tenemos que luchar todos por una sociedad mejor, sin injusticias, sin prepotencia, sin trampas; ayudar y que se sepa que es inmoral saltarse o brincarse la fila, si no nos corresponde”, remarcó el primer mandatario.
El Ejecutivo federal insistió en erradicar el influyentismo en la vacunación contra el Covid, “que no predomine el poder político ni el poder económico, pues a todos nos va a llegar la vacuna en su momento, lo que estamos haciendo es apresurarnos, hacerlo lo más pronto posible para proteger a la gente”.
En la capital mexicana se suscitó un caso similar este miércoles, cuando al menos 100 integrantes de la secciones 12 y 13 del Sindicato Único de Trabajadores del Gobierno de la Ciudad de México (SUTGCDMX) intentaron colarse a la jornada de vacunación, hasta ahora exclusiva del personal médico.
Ante estos actos, la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, afirmó que habrá sanciones administrativas, incluso penales, para quienes quieran violar las disposiciones de las autoridades de salud.
“No vamos a permitir, bajo ninguna circunstancia, que un líder de una sección sindical o un comisionado sindical que no está al frente (de la respuesta al Covid-19) genere alguna influencia o por cualquier vía quiera entrar a la lista que ha estado coordinando la Secretaría de Salud federal”, sentenció.
En conferencia de prensa, la gobernante capitalina comentó que la Secretaría de Salud local ya dio los nombres a los encargados de aplicar la vacuna, que se encuentran en la primera línea de batalla contra el coronavirus en los hospitales Covid de la CDMX.
En ese sentido, el líder del Directorio del Sindicato Único de Trabajadores del SUTGCDMX, Joel Ayala, expresó su “respaldo total” a Sheinbaum Pardo para sancionar, a través de la vía administrativa o penal a los empleados que intentaron alterar el programa nacional de vacunación.
NL experimenta la ocupación hospitalaria más alta
La saturación hospitalaria en centros Covid-19 de Nuevo León llegó ayer a 66.2 por ciento, al reportar mil 567 pacientes internados, de 2 mil 366 camas disponibles en hospitales públicos y privados para atender la pandemia.
Respecto al día anterior, este indicador se incrementó en 52 camas ocupadas más.
Manuel de la O Cavazos, secretario de Salud local, dijo que el número de pacientes intubados por Covid también registró la cifra más alta de la pandemia, al reportar 351 personas conectadas a ventilador mecánico.
Las fatalidades, por otro lado, llegaron a 6 mil 513, de éstas, 35 en las últimas 24 horas.
En cuanto a los casos positivos diarios, estos mantuvieron ayer su tendencia al alza al registrar 619 nuevos contagios, el número más alto de los últimos 15 días.
“Seguramente el aumento de contagios fue por las compras navideñas (…) esperemos que la sociedad entienda que es un problema muy serio y que, aparte de la crisis de salud, hay una crisis severa, pero me pregunto, si hay crisis económica por qué anda todo mundo en la calle de compras, ¿no dicen que no hay dinero?”, cuestionó el encargado de la respuesta estatal a la pandemia.
