Luego de que se dieran a conocer distintos casos de candidatos a cargos públicos que ofrecen tarjetas con la promesa de un apoyo social,, el Presidente Andrés Manuel López Obrador llamó a la Fiscalía General de la República (FGR) a investigar porque “a todos hay que castigarlos”.
“Si hicimos una denuncia y salen otros casos, qué bueno y hay que denunciar todos los casos, sean del partido que sean porque es ilegal la compra del voto, de manera directa o simulada”, subrayó.
En su edición de ayer, La Razón detalló que más de una decena de aspirantes a gubernaturas, diputaciones y alcaldías utilizan esta estrategia, por la que Fiscalía abrió una investigación en contra del candidato del PRI en Nuevo León, Adrián de la Garza. Estos casos involucran a militantes de Morena, PRI, PVEM, PAN, PES, MC y RSP.
Durante su conferencia mañanera, el Presidente se congratuló de que tuvo efecto su denuncia en contra del abanderado priista al gobierno de Nuevo León pues “el voto tiene que ser libre, secreto, no debe haber nada a cambio, no es una mercancía”.
“Yo celebré ayer (el martes) que la Fiscalía ya esté haciendo esto (investigar) y ojalá continúe, no se permita para nada el fraude electoral (...) Ahora las cosas están cambiando, el pueblo está más despierto que nunca, están desesperados. Y que porque de otros partidos están haciendo lo mismo, a todos hay que castigar”, aseveró el mandatario.
Cuestionado sobre si la entrega de dichas tarjetas se compara con el ofrecimiento de entregar pensiones a los adultos mayores, López Obrador aseveró que “no somos iguales” y remarcó que “yo nunca he entregado despensas, ni tarjetas, ni he comprado votos, porque nosotros tenemos principios, ideales y no estamos acostumbrados a triunfar a toda costa, sin escrúpulos morales”.
Por ello, dijo, “ni modo que lleguemos a la Presidencia y que estemos viendo todo eso y nos quedemos callados. Nos estaríamos traicionando a nosotros mismos y traicionando al pueblo”.
El titular del Ejecutivo federal consideró que se debe reformar la ley electoral para evitar hacer campañas donde se ofrezcan tarjetas o monederos electrónicos, entrega de dinero a adultos mayores, madres solteras, entre otros.
Recordó, asimismo, que una de las iniciativas que promovió ante el Congreso fue convertir en delito grave el fraude electoral, así como la corrupción, que no estaba considerada así desde que el expresidente Carlos Salinas de Gortari lo modificó en el Código Penal.
Sin embargo, aseveró, “¿de qué sirve que se reforme la Constitución, que sea delito grave el fraude el electoral, y que sigan haciéndolo (…) como siempre, sigan repartiendo tarjetas, sigan repartiendo despensas, sigan utilizando dinero de procedencia ilícita para comprar votos, para comprar lealtades, para comprar a periódicos o alquilar a la prensa?”.