El presidente Andrés Manuel López Obrador llegó a Acapulco, Guerrero, para supervisar los daños que dejó el huracán "Otis". Antes de su llegada, se reportó un saqueo de tiendas de zona Diamante y la Costera Miguel Alemán.
Aunque el mandatario aún sigue en la zona de desastre, anunció que mañana realizará de manera habitual su conferencia mañanera, donde dará detalles del recorrido.
El mandatario, junto con los titulares de las secretarías de la Defensa Nacional (Sedena), Marina (Semar) y Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), cruzó a pie la carrera federal México-Acapulco, luego que la unidad en la que viajaban quedara atascada en la zona de derrumbes.
El primer informe que tuvo el jefe del Ejecutivo fue que al menos 58 torres de cableado eléctrico fueron derrumbadas por los vientos del huracán "Otis", según, reportes del titular de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), Manuel Bartlett, luego de realizar un sobrevuelo en helicóptero en el área afectada.
Para atender lo anterior la CFE desplegó, mil 320 trabajadores electricistas, 159 grúas, 511 vehículos, 37 plantas de emergencia, 21 torres de iluminación y tres helicópteros.
