Antes de la reunión Cumbre de Líderes de América del Norte, el Presidente Andrés Manuel López Obrador enviará una carta a su homólogo de Estados Unidos, Joe Biden, para que conozca con anterioridad los temas que quiere abordar durante el encuentro.
Entre los asuntos que interesan a López Obrador figuran: la integración continental de América y no sólo de América del Norte, los programas para combatir las desigualdades en la región latinoamericana y terminar con el injerencismo norteamericano, tutelado por la doctrina Monroe y el Destino Manifiesto.
“Yo lo que sí quiero es enviarle una carta antes de la reunión bilateral para que esto que estoy planteando, que lo estoy desarrollando, lo tenga antes del encuentro, porque si no, aunque desde luego que es muy importante el conversar y además con un estadista, y van a salir cosas buenas para nuestros pueblos, pero sí ya hay un documento previo. Esto puede ayudar a que tratemos más estos temas y que también el presidente Biden pueda preparar su agenda que nos quiere plantear”, dijo el mandatario.
Aun así, descartó que durante la reunión se pueda abordar el caso del exsecretario de Seguridad Pública Genaro García Luna.
El Presidente ratificó la invitación a su homólogo estadounidense, Joe Biden, para que utilice el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), aunque reconoció que la decisión final será del Servicio Secreto que protege al mandatario.
“Se está viendo lo de la llegada del presidente Biden, lo está viendo el Servicio Secreto de Estados Unidos, lo que era antes el Estado Mayor. Entonces, nosotros estamos planteándoles que lo mejor es que el avión aterrice en el aeropuerto Felipe Ángeles. Y ayer les explicaba yo que no es asunto logístico, sino político... Se encargarían de decir de que es tan inseguro y está tan mal hecho y tan distante el aeropuerto Felipe Ángeles, que ni el presidente Biden quiso llegar a ese aeropuerto, o sus agentes de seguridad no lo recomendaron, aun cuando ya el primer ministro Trudeau aceptó llegar”, señaló López Obrador respecto a los que considera sus adversarios.
El Gobierno mexicano ha estado en contacto con Washington para explicar la situación que prevalece con sus opositores y los beneficios que tendría al aterrizar en Santa Lucía.
“Entonces, es sólo lo que se les está informando al gobierno de Estados Unidos, que no se presten a esta oposición ramplona y conservadora que se vale de todo, pero eso lo van a resolver los de la secreta”, abundó.
Además, el Jefe del Ejecutivo federal reveló que mientras a sus antecesores los cuidaban ocho mil elementos del Ejército, lo que impedía que tuvieran contacto con la ciudadanía, en su caso solamente 15 personas se encargan de la seguridad.
“Aquí afortunadamente ya no está el Estado Mayor Presidencial, porque esos eran los que mandaban, no podía el presidente hacer nada, lo tenían rodeado. Ocho mil elementos (...) cuidaban al presidente de México, ocho mil elementos del Estado Mayor Presidencial, y ahora en Ayudantía son 15, la mayoría mujeres, por cierto”, afirmó López Obrador.