El Presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que su administración no cedió a las presiones del magnate Elon Musk, quien además de su planta armadora, buscaba establecer una fábrica de baterías en México.
“Quieren una planta de baterías, nada más que EU tiene ahora una política buena, considero, que si una empresa invierte, el gobierno le da un subsidio del 50 por ciento de su inversión; o sea, si invierte mil millones de dólares, el gobierno le da a fondo perdido 500 millones y no queda el gobierno como socio.
Es un estímulo y todo lo que tiene que ver con industrias limpias, todo lo que tiene que ver con la industria automotriz cuando me habla de las baterías, sí está muy bien, pero nosotros no vamos a dar 50 por ciento, eso no podríamos, no va de acuerdo con nuestras políticas”, reconoció.
En cambio, dijo, México ofrece otras ventajas de tipo competitivo, como un bono demográfico importante, pues el promedio de los trabajadores tiene 29 años, además de mano de obra calificada.