La conferencia matutina del Presidente Andrés Manuel López Obrador se interrumpió de manera repentina debido a un apagón ocurrido cuando el titular de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), Luis Cresencio Sandoval, presentaba el informe de actividades en el último mes de 2020 respecto al combate a la delincuencia.
Fueron pocos segundos, si acaso 20, los que el salón Tesorería de Palacio Nacional, donde habitualmente se realizan los encuentros del Ejecutivo federal con la prensa, quedó en penumbras. Los secretarios de Estado y el mandatario guardaron silencio.
El titular de la Sedena daba su reporte... “En lo que corresponde a las inundaciones en Tabasco y Chiapas, se han entregado 20 mil 685 paquetes de enseres domésticos; en Macuspana, 12 mil 378; en Nacajuca, ocho mil 307…”, cuando de repente exclamó: “se fue la luz”.
Todos quietos, mientras los trabajadores de la Presidencia se apuraban a restablecer la energía eléctrica en el histórico salón.
Sentaditos y bien portados permanecieron en sus lugares los titulares de Marina, José Rafael Ojeda; de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez, y de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, así como los subsecretarios de Salud, Hugo López-Gatell, y de Seguridad, Ricardo Mejía.
Pasaron unos instantes para que las luminarias volvieran a encenderse poco a poco; lo mismo con la pantalla, pero se volvió a apagar. Otros tres segundos y el jefe militar dijo: “listo”.
Y continuó la exposición... “En este plan de distribución de despensas llevamos el 10.3 por ciento del total”.
No faltaron algunos murmullos entre los asistentes, que hasta se preguntaron: “¿se les adelantó el INE para silenciar la mañanera?”; mientras otra persona afuera del recinto bromeaba: “¡Ay, mamá, los de la luz!”.
Nadie sabe, nadie supo las causas del apagón, aunque empleados de la Presidencia minimizaron el asunto al decir que pudo tratarse de un pequeño corto sin consecuencias graves.
Paradójicamente, minutos después, López Obrador se refirió a los trabajadores electricistas, así como a los petroleros, cuando una reportera le preguntó sobre una supuesta rebelión de estos últimos.
“Se han portado bien y estamos contentos con ellos”, aseveró.
Incluso aprovechó para “desnudar” al gobierno pasado por acordar con líderes sindicales de los petroleros aumentar la edad de jubilación de los trabajadores, a cambio de privilegios. Sin embargo les regresó el alma al cuerpo porque ese acuerdo establecido en el Contrato Colectivo de Trabajo ya lo canceló su administración.
No es la primera vez que la conferencia mañanera se queda sin luz. Hace casi un año se dio el primer caso (marzo de 2019), cuando el Palacio Nacional estuvo a oscuras.
Esto no importó al Presidente, quien continuó en penumbras durante varios minutos, hasta que le colocaron unas lámparas energizadas con una planta de emergencia.