A pesar de que el partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) ha reiterado que el método de encuesta es el más confiable para medir y conocer la decisión de la militancia y de los simpatizantes de la Cuarta Transformación, algunos de los 153 aspirantes a abanderar al partido rumbo a la elección de seis gubernaturas en 2022 han manifestado su inconformidad con el proceso interno y lo que se ha derivado de éste.
Las objeciones de los militantes morenistas no son los principios de pluralidad e inclusión que el partido maneja para sumar a quienes simpaticen con su ideología, sino que cuando figuras provenientes de otras fuerzas políticas, o de otras ramas, se incorporan al movimiento, los desplazan al momento de buscar un espacio significativo, como el que representan los comicios.
Así lo expuso Santiago Fierro Martínez, personaje de izquierda y uno de los cuatro seleccionados por el Consejo Nacional de Morena para contender por la gubernatura en Durango, quien señaló que hay un “pragmatismo a ultranza” dentro de este instituto político, ya que varios “se aprovechan de los estatutos para llevar agua a su molino”, lo que ha generado que la competencia no sea equilibrada.
Asimismo, manifestó su inconformidad con el método de encuesta de reconocimiento a población abierta, en el cual no resultó favorecido frente a los otros aspirantes —Marina Vitela, Maribel Aguilera y José Ramón Enríquez—, a pesar de su cercanía con la población, dijo a La Razón.
En este punto coincide Irma Juan Carlos, diputada federal y una de los cuatro seleccionados para buscar la gubernatura en Oaxaca, quien apuntó que el problema no es que se integren personajes políticos de otros partidos, sino que hay quienes ven a Morena como una “agencia de colocaciones” para llegar al poder, lo que ha causado que “se reciclen los mismos políticos de siempre”.
Sobre el método de encuesta, manifestó que no es justo porque no mide militancia, principios ni trabajo, sino sólo fama; sin embargo, es algo a lo que han decidido ceñirse, pues lo marca la convocatoria, por lo que se acercó a la dirigencia nacional para solicitar que la muestra de la población sea más amplia, ya que no hay confianza en los resultados cuando ésta es reducida.
En el mismo estado, el exalcalde de Álvaro Obregón (CDMX) y ahora aspirante a la gubernatura, Alberto Esteva, presentó hace varios días una impugnación ante la Comisión de Honor y Justicia de Morena contra el proceso de selección, por lo que consideró falta de transparencia, y aseguró que no había claridad sobre los criterios bajo los cuales algunos no fueron elegidos.
Por otro lado, Marybel Villegas, senadora y aspirante a la gubernatura de Quintana Roo, pidió que las encuestas no sean amañadas, ya que el proceso interno del partido ha sido cuestionado; a pesar de esto, refrendó su voto de confianza para la Comisión Nacional de Elecciones.
En Aguascalientes, el aspirante morenista Aldo Ruiz se expresó abiertamente contra las encuestas realizadas por empresas y ha advertido que los resultados buscan crear tendencias distorsionadas sobre la voluntad de los morenistas.
Además ha resaltado que nadie debe ser impuesto por los sondeos y recalcó que éstos no deberían ser considerados al momento de decidir.
Mientras tanto, en Tamaulipas la contienda no ha revelado inconformidades internas, y en Hidalgo el presidente del Consejo Estatal, Andrés Caballero, negó este lunes que ya se hayan determinado los perfiles rumbo a la gubernatura, como afirman algunas versiones.
