A l menos 14 delitos aumentaron de enero a octubre de este año, respecto al mismo periodo del 2021, con el incesto, acoso sexual y la violencia de género como los que registraron más casos.
Ocho de esos ilícitos son considerados de alto impacto: robo a transeúnte, robo a transporte público, trata, extorsión, violación, narcomenudeo, violencia familiar y corrupción de menores.
De acuerdo con el último reporte del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), el incesto reportó un alza del 120 por ciento, al pasar de cinco a 11 delitos; el acoso sexual repuntó 55 por ciento, al pasar de cinco mil 925 a nueve mil 209, así como la violencia de género, al crecer 30 por ciento, de tres mil 475 a cuatro mil 545 episodios delictivos.
Otros delitos que también reportaron un incremento son el hostigamiento sexual, con 32 por ciento; trata de personas, 24 por ciento; abuso sexual, 20 por ciento; extorsión, 19 por ciento; corrupción de menores, 11 por ciento; violencia familiar, con siete por ciento; robo a transeúnte, seis por ciento; violación y narcomenudeo, cuatro por ciento; robo a transporte público, dos por ciento, y robo en general, uno por ciento.
Francisco Rivas, director del Observatorio Nacional Ciudadano, detalló que el Gobierno federal tiene una narrativa de que las cosas van bien, pues si bien el homicidio doloso tiene una tendencia a la baja, no es efecto de una estrategia de seguridad, ya que debería relacionarse con los demás delitos.
“Deberíamos tener evidencia de qué otros delitos van bajando y es donde no vemos un avance, pues siguen otros temas, como la desaparición de personas, entre otros. El problema es que el discurso político le gana al verdadero compromiso de generar mejores condiciones de seguridad, y como este Gobierno ya decidió que esta estrategia funciona, difícilmente se verá un cambio en los últimos años, lo que se traduce en más violencia”, infirió.
El experto en seguridad indicó que uno de los aspectos que el observatorio ha subrayado es que hay un grave problema en violencia de género, que está relacionado con otros fenómenos, pero en todos los casos las mujeres están en severo riesgo.
“Todos los delitos que afectan a la mujer están viendo un crecimiento desmedido y si bien es un efecto de la pandemia, sigue permaneciendo en el panorama mexicano junto a otros factores”, agregó.
Francisco Rivas comentó que urgen recursos para poder fortalecer programas, ya que las fiscalías son las que más se han visto afectadas por la falta de presupuesto.
Acerca del tema, Paulina Amozurrutia, directora nacional del movimiento Unión Mujer, destacó que el aumento en la violencia se debe principalmente a los constantes recortes que el Gobierno federal ha realizado en los últimos años, además de que siguen los estragos de la pandemia en muchos hogares del país.
“Esos son los dos principales motivos por los que la violencia persiste. Las autoridades no han hecho un correcto trabajo tras la pandemia, porque la violencia familiar persiste, además de que las mujeres siguen siendo el sector más vulnerado y los recortes persisten”, indicó.
PRD acusa que Gobierno “maquilla” los registros
El dirigente nacional del PRD, Jesús Zambrano, arremetió en contra de la estrategia de seguridad del Gobierno federal, ya que aseveró que la política de “abrazos y no balazos” sigue sin funcionar, y acusó que se maquillan cifras.
“El Gobierno de Andrés Manuel López Obrador sigue sin reconocer que la política abrazos, no balazos, no está funcionando. Maquillan cifras para ocultar que la delincuencia se ha apoderado de las calles. En octubre se registraron dos mil 766 homicidios dolosos”, señaló en sus redes.
El perredista ha sido un crítico del plan de seguridad desde el inicio del sexenio, debido a que ha señalado en reiteradas ocasiones que debe cambiar, ya que los delitos de alto impacto continúan al alza y “no hay resultados”.
De acuerdo con la agencia TResearch, este lunes se registraron 75 homicidios dolosos, para sumar 139 mil 510 en lo que va del actual Gobierno.
Además, señaló que de los homicidios se registraron ocho en Baja California y Guanajuato; cinco en Guerrero, Nuevo León y Puebla; cuatro en Oaxaca y Sinaloa; Chihuahua, Jalisco, Michoacán, San Luis Potosí y Veracruz, tres.
