Un becerro, uno, entre los más de un millón 300 mil bovinos que llegan a los Estados Unidos procedentes de México cada año, provocó que las autoridades del Departamento de Agricultura de ese país impusieran una sanción a ganaderos mexicanos de 11 estados del país.
La medida no sólo afecta a los productores nacionales de bovino, ya que el castigo podría impactar a los consumidores al provocar un incremento en los precios de la carne.
Todo se originó cuando las autoridades de EU detectaron al famoso becerro, el cual presentaba secuelas de tuberculosis y, antes del Día del Amor y la Amistad, el Servicio de Inspección Sanitaria de Plantas y Animales del Departamento de Agricultura de EU (APHIS-USDA por sus siglas en inglés) retiró a zonas de 11 estados la acreditación de hato ganadero libre de tuberculosis.
Con esta medida, que entró en vigor el 16 de abril, dejarán de exportarse a EU cada año alrededor de 100 mil cabezas de ganado, 7.6 por ciento del total que se vendió en 2020.
En entrevista con La Razón, el presidente de la comisión de Ganadería de la Cámara de Diputados, Eduardo Ron Ramos, explicó que las entidades sancionadas son consideradas “zonas acreditadas preparatorias”; es decir, no han obtenido el certificado de sanidad, aunque sí pueden vender sus animales a estados exportadores o que cuentan con el registro estadounidense.
La medida, que impide que puedan vender sus animales a zonas, regiones o estados que cuenten con la acreditación de la APHIS-USDA, ha sido calificada del lado mexicano de “unilateral” y afecta a “zonas acreditadas preparatorias” de Baja California, Chiapas, Estado de México, Guanajuato, Guerrero, Jalisco, Michoacán, Nayarit, San Luis Potosí, Tabasco y Zacatecas.
Directo a tu bolsillo
En la Confederación Nacional de Organizaciones Ganaderas (CNOG) anticipan que la medida del APHIS-USDA provocará especulación en los mercados que llevarán a un incremento en los precios de la carne.
“Generalmente lo que provocan este tipo de situaciones es la especulación que se crea en los mercados, pues no falta quienes quieran sacar ganancias del río revuelto, ante la presunción de que esas regiones ya no puedan exportar en el futuro, pues pudieran entrar en un proceso de distorsión de precios del ganado, incluso en el ámbito nacional”, dijo Oswaldo Cházaro, presidente de la CNOG.
Cházaro Montalvo resaltó que los técnicos estadounidenses sólo detectaron un animal con las lesiones que deja la Tuberculosis Bovina entre un millón 300 mil cabezas de ganado que se enviaron a ese país en el ciclo 2019-2020, lo que demuestra “la bajísima prevalencia, y que el trabajo se ha estado haciendo bien, puesto que es quizá uno de los parámetros que se haya tenido”.
Agregó que en octubre del año pasado lo presentaron como “asunto que les gustaría discutir y de repente lo convirtieron en una revolución de manera unilateral y eso viola el principio de reciprocidad que se tiene porque, así como ellos nos acreditan regiones y plantas de proceso, México también les reconoce y acredita sobre todo plantas de proceso para los productos que ellos nos exportan, también de origen agropecuario”.
Negociación o panel de controversia
Ron Ramos agregó que la medida “pareciera un movimiento político para apoyar a sus productores sobre la competencia mexicana”, y que las organizaciones ganaderas de México están buscando a sus homólogas estadounidenses, mientras que el Servicio Nacional de Sanidad e Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) conversa con la USDA-APHIS y han pedido al canciller, Marcelo Ebrard, que intervenga con el secretario de Estado, Antony Blinken, para encontrar una solución.
En caso contrario, advirtió Ron Ramos “tendremos que recurrir a un panel de controversia del Tratado de Libre Comercio México-Estados Unidos- Canadá (TMEC)”.
En tanto, Senasica confirmó que ya envió un comunicado a APHIS-USDA donde solicitó que se reconsidere la decisión de reclasificar a las regiones mexicanas que quedarían con estatus de “No Acreditado”.
Senasica propuso que se realice una nueva inspección por parte de los técnicos estadounidenses y en conjunto con especialistas mexicanos se lleve a cabo la revisión del hato ganadero en cada región.
El organismo de la Secretaría de Agricultura de México advierte que la decisión de la parte estadounidense “desestima méritos legítimos de la mayoría de las zonas incluidas en la resolución, toda vez que los casos de bovinos mexicanos con huellas de tuberculosis encontrados en las plantas de sacrificio en EU disminuyeron de tal forma que de 1.3 millones de cabezas que se exportaron durante el pasado ciclo ganadero 2019-2020, sólo un bovino presentó lesiones causadas por la enfermedad”.