Por la temperatura, cansancio, falta de alimento y agua, la caravana migrante que se encuentra en el municipio de Pijijiapan, Chiapas, tardará por lo menos tres días en llegar a Tonalá, su siguiente parada, toda vez que estarán descansando cada seis o diez kilómetros.
La distancia entre ambos municipios es de 77 kilómetros y es de las más largas en el trayecto, por ello tardarán en arribar a la localidad.
A pesar de que la caravana saldría la tarde de este miércoles rumbo a Tonalá, los organizadores decidieron esperar hasta la madrugada del jueves para retomar su camino, por lo que esperarán un día más.
“Decidimos quedarnos porque hay muchos niños con dolor de cabeza, no están comiendo bien, están deshidratados y cansados, por ello requieren más tiempo para que se repongan y retomen fuerzas. Nos vamos a esperar un día más para que estemos descansamos y podamos caminar con más fuerza”, explicó Irineo Mujica, director de Pueblo sin Fronteras.
La ruta para este jueves es salir con trayectoria a Tonalá, pero avanzarán primero seis kilómetros para conocer las condiciones de sus integrantes y saber si pueden avanzar más trayecto.
“Mañana lo primero es avanzar seis kilómetros, después descansar y por la tarde retomar el camino, pero nos vamos a llevar tres días para llegar a Tonalá”dijo.
Respecto a la petición de camiones a normalistas y al Ejército Zapatista de Liberación Nacional, dijo que no ha habido ninguna respuesta, además reiteró que el trayecto será para Tuxtla Gutiérrez.
ANR