La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, aseguró que durante su sexenio se logrará reducir la jornada laboral a 40 horas, con el apoyo de los empleadores.
“Estoy segura de que lo vamos a lograr. En acuerdo con las y los empleadores iremos alcanzando paulatinamente en el sexenio la semana de 40 horas”, mencionó ante un Zócalo completamente lleno.
En su mensaje, también adelantó que se enviará una reforma para garantizar la seguridad social para las personas que trabajan mediante las aplicaciones móviles, como Uber, DiDi y Rappi.
Asimismo, la nueva titular del Poder Ejecutivo refrendó su compromiso con las clases trabajadoras del país y afirmó que se dará continuidad al incremento del salario mínimo a partir de 2025.
En la reforma presentada el año pasado, se propuso reducir la jornada de los trabajadores y trabajadoras en el país, de 48 a 40 horas semanales, pero fue puesta en la congeladora en el Congreso de la Unión.
En caso de aprobarse esta reforma, se modificaría el artículo 123 de la Constitución así como el artículo 69 de la Ley Federal del Trabajo.
La polémica de esta reforma radica en que recientemente se modificó la Ley Federal del Trabajo para otorgar a la fuerza laboral formal 12 días de vacaciones en su primer año, cuando anteriormente sólo se daban seis.
¿Cómo quedarían los horarios de aprobarse la reducción de la jornada laboral a 40 horas?
En México se trabaja seis días a la semana con un día de descanso y los turnos que existen están distribuidos de la siguiente manera:
- Turno diurno: Está marcado entre las 06:00 horas y las 20:00 horas, sin que en este periodo se puedan acumular (supuestamente) 8 horas como máximo.
- Turno nocturno: Está marcado entre las 20:00 horas y las 06:00 horas del día siguiente y su duración máxima es (también supuestamente) de 7 horas.
- Turno mixto: Este comprende dos periodos del turno diurno y el nocturno, siempre y cuando éste último no supere las 3 horas y media. En caso de que lo haga, se considerará jornada nocturna, con duración máxima de 7 horas y 30 minutos.
En cuanto a las horas extra, no habría cambios, pues la reforma de reducción de 48 a 40 horas laborales a la semana no contempla alguna modificación en este sentido; ante esto, las empresas tendrían que seguir pagando al doble del salario regular de los trabajadores las horas extra trabajadas.