Con el rechazo de los grupos parlamentarios de oposición, el Senado avaló en comisiones el dictamen por el que se amplía hasta 2028 la participación de las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad pública.
Con 18 votos a favor, 10 en contra y una abstención, las Comisiones Unidas de Puntos Constitucionales y Estudios Legislativos Segunda aprobaron el dictamen de la minuta que envió la Cámara de Diputados, por lo que ahora pasará al pleno de la Cámara alta.
Durante el debate, senadores del PAN, PRI, PRD, Movimiento Ciudadano y Grupo Parlamentario Plural, manifestaron públicamente su negativa al contenido de la reforma.
El presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales, Eduardo Ramírez Aguilar, reconoció que el tema tiene un “tinte político”, pero insistió en que la prioridad es darle seguridad a los mexicanos, por lo que pidió a las fuerzas políticas de oposición no cerrar la posibilidad a lograr un consenso.
El senador chiapaneco dijo que es evidente que ya están todos involucrados en los tiempos electorales, por lo que para Morena y la mayoría legislativa ésta será la última reforma que trabajarán con urgencia.
“Será la última reforma que estaremos discutiendo con urgencia, porque prácticamente estaremos agotando nuestra agenda como grupo parlamentario mayoritario”, expresó.
Durante el debate, la priista Sylvana Beltrones propuso que se tomara más tiempo para construir una verdadera reforma consensuada con todas las autoridades, lo cual fue rechazado por la mayoría morenista.
El coordinador de la bancada del PRD, Miguel Ángel Mancera, quien respaldó la propuesta de Beltrones, criticó que se busque ampliar el plazo de las Fuerzas Armadas al vapor y se pronunció porque el debate sobre el tema se dé con el tiempo suficiente.
La senadora del PRI, Claudia Ruiz Massieu, quien anunció su voto en contra, criticó la inconstitucionalidad de la reforma y su pobreza de argumentos, además de que recordó que no es necesario que se haga esta modificación para que el Presidente de la República disponga de la Fuerza Armada Permanente en tareas de seguridad, porque actualmente ya tiene esa facultad.
El senador del PAN, Damián Zepeda, manifestó que no respaldará esta iniciativa, porque surgió de un uso político de la justicia, ya que se logró un acuerdo de impunidad entre el gobierno y la dirigencia de Alejandro Moreno Cárdenas.
El coordinador emecista Clemente Castañeda aseveró que esta reforma “es una vil simulación, porque en el fondo no hay un cambio de estrategia”.
La coordinadora del Grupo Parlamentario Plural, Nancy de la Sierra, quien anunció el voto en contra de su bancada, enfatizó que “estamos cansados de estas propuestas improvisadas, incompletas”.
En la sesión del pleno de este martes se dará la primera lectura y se prevé que la reforma se vote el miércoles próximo.
Opositores, presionados desde diversos frentes
Ante el cierre de filas del bloque de contención para rechazar la reforma que amplía hasta el 2028 el periodo de las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad, los senadores del PRI y del PRD, principalmente, son objeto de presiones para que modifiquen su voto.
El coordinador de Morena, Ricardo Monreal, principal cabildero para lograr la mayoría calificada para avalar la reforma constitucional, admitió que ha encontrado una posición inamovible por parte de la oposición.
Sin embargo, según fuentes consultadas que prefirieron mantener su nombre bajo reserva, la lista de los senadores del PRI cuyos votos están en duda debido a las presiones de las que han sido objeto es creciente, pues además de Eruviel Ávila, Verónica Martínez, Ángel García Yáñez y Carlos Aceves del Olmo, se suman también la zacatecana Claudia Anaya y Manuel Añorve, al tiempo que los tres senadores del PRD también son objeto de “coacción”.
En esta relación también estaba Mario Zamora, aunque ya aclaró que está a favor de la moratoria constitucional en este caso.
Entre estos senadores no se ha confirmado la presión que están recibiendo, la vicecoordinadora del PAN, Kenia López Rabadán, comentó: “Me han dicho que están aguantando las presiones, que son muchas, pero que van a votar, por supuesto, para detener esta aberración”.
Según fuentes consultadas entre las bancadas del partido tricolor y del sol azteca, la coacción viene hasta del propio partido, particularmente en el caso de los senadores del PRI, ya que la instrucción de la dirigencia de Alejandro Moreno es que sí se avale la reforma.
A esta presión se suma la realizada, más que por Monreal Ávila, por funcionarios federales, particularmente desde la Secretaría de Gobernación, como sucedió en el caso del líder de la CTM, Carlos Aceves del Olmo, a quien le recordaron que en sus manos tiene la responsabilidad de la vida de muchos obreros.
Las personas consultadas refirieron que no ha faltado el comentario de que a los senadores priistas se les puede aplicar la estrategia al estilo de Alito; es decir, algunas investigaciones que sacarían a la luz riquezas de origen dudoso.
Alito dice que respetará voto disidente en tricolor
El dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, aseguró que se respetará el voto que emitan las y los senadores en contra de la reforma aprobada en San Lázaro para ampliar la presencia militar en las calles.
“Nosotros en el Comité Ejecutivo Nacional del PRI somos respetuosos de cualquier opinión que haya al interior de nuestro partido y nosotros respetaremos la decisión que tomen las y los senadores en la votación”, sostuvo.
En conferencia, refirió que ha sostenido comunicación con algunos de los senadores, aunque omitió mencionar sus nombres; además, aseveró que no ha presionado a los legisladores para que respalden esta reforma, e insistió en que el haber impulsado esta iniciativa desde su bancada no fue una “moneda de cambio” con Morena, ni un privilegio.
“Lo he dicho siempre: no hemos sido ni seremos una oposición en contra de todo y a favor de nada. Lo que quiere el pueblo de México son propuestas, son respuestas, son soluciones, para que podamos tener mayor tranquilidad, paz, armonía, crecimiento económico, empleo, oportunidades”, dijo.
Por lo que hace a la negativa del PAN para volver a entablar diálogo, el coordinador de diputados del PRI, Rubén Moreira, dijo que la alianza no se romperá por parte del tricolor.