Conmemoración de la promulgación de la Constitución de 1917

Pérez Dayán: Ningún poder está por encima de la Constitución

El ministro señala en aniversario de la Carta Magna que la militancia y Judicatura no son afines; hacer valer la ley, uno de los actos democráticos más genuinos, dice; titular de Segob, en representación del Presidente defiende reformas; regresarán el pacto social contra avasallante neoliberalismo, afirma; “igualdad será la gran ley”: Alcalde; representantes del Legislativo, por verdadera división de poderes; ven necesario acotar facultades contra autoritarismo; gobernador Kuri convoca a la tolerancia y unidad

El ministro Pérez Dayán (podio) en el Teatro de la República en Querétaro, ayer frente a representantes de los otros Poderes, el gobernador Kuri y miembros del gabinete federal.
El ministro Pérez Dayán (podio) en el Teatro de la República en Querétaro, ayer frente a representantes de los otros Poderes, el gobernador Kuri y miembros del gabinete federal. Foto: Cuartoscuro

En el marco de la conmemoración de la promulgación de la Constitución de 1917 en Querétaro, el ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) Alberto Pérez Dayán afirmó que ningún poder está por encima de la Constitución; aseguró que la militancia y la Judicatura no son afines, por lo cual rechazó que jueces, magistrados y ministros sean electos por voto popular.

Durante su mensaje en el recinto histórico del Teatro de la República, con la representación de la presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Norma Piña, Pérez Dayán dejó en claro que es la Constitución la que dio a la SCJN la facultad para invalidar leyes, “independientemente de la fuente de la que provenga, electa o no electa”.

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“El Poder Judicial tiene perfectamente claras esas palabras y entiende que, por encima de la Constitución, no hay poder alguno, nada ni nadie. No permitamos que esto se olvide o se confunda. Y es precisamente la Constitución Federal, esta que ahora conmemoramos, la que dio a la Suprema Corte de Justicia de la Nación las facultades suficientes para invalidar cualquier acto que no la respete, independientemente de la fuente de la que provenga. Electa o no electa. Sin distinción alguna”, sostuvo Alberto Pérez Dayán.

El Ministro destacó que los tres poderes de la Unión y sus integrantes, cualquiera que sea su origen, son democráticos, al surgir, precisamente, del propio estamento constitucional. “Aquí, ninguno es más democrático que el otro”, agregó ante las representantes del Legislativo y Ejecutivo.

Alberto Pérez Dayán expuso que el texto supremo explica, en su artículo 3, que por democracia debemos entender: “no solamente aquella estructura jurídica y un régimen político, sino un sistema de vida fundado en el constante mejoramiento económico, social y cultural del pueblo”.

Abundó que cada sentencia del Poder Judicial que obliga a quienes no cumplen con el mandato de la Constitución o de la ley, a realizar lo que éstas prescriben, representa un acto democrático que honra la confianza popular en él depositada. En otras palabras, hacer cumplir la ley es uno de los actos democráticos más genuinos del servicio público.

Alberto Pérez Dayán dijo que “defender a la Constitución es defender al pueblo mismo, aunque no siempre se quiera atender así. Duele escucharlo, lo sé, pero más doloroso sería dejarlo pasar”.

Mencionó que en el sistema dibujado por el constituyente reunido en este recinto hace más de un siglo, se entendió nítidamente que la participación ciudadana y la legitimación de las instituciones se entrelazan de manera indisoluble.

“El Tribunal Constitucional creado décadas más tarde, es el intérprete lúcido de la voluntad popular, materializada en la norma, que le permite y obliga a asegurarse de la conformidad de las leyes y sus procesos de creación con los preceptos supremos. De no atenderlos, esa la ley no es ley, y tampoco debe ser obedecida. Declarar su invalidez es la consecuencia de sus propios vicios. De esto, de esto no debe sorprenderse nadie”, dijo.

Alberto Pérez Dayán recordó las palabras del constituyente Paulino Machorro y Narváez, quien destacó que “…el magistrado no es igual al diputado o al senador: el magistrado es radicalmente distinto; él no va en el ejercicio de sus funciones a representar a la opinión pública; no va a representar a nadie; no lleva el criterio del elector, lleva el suyo propio; simplemente se le nombra como persona en la cual se cree que se reúnen ciertos requisitos indispensables para llenar una función social”.

Y continúo la cita: “él tiene que obrar en su función precisa, obrar quizá hasta contra la opinión de los electores… La esencia misma de la magistratura es muy distinta de la función social que ejerce el representante político… Hay que alejar al Poder Judicial de la política y no arrojarlo al fondo de ella, para que no resulte un juego de las pasiones”.

“Agrego yo: militancia y judicatura no son afines, estas palabras se repiten hoy en este recinto 107 años después”, señaló el ministro Alberto Pérez Dayán.

Al final de su mensaje en el acto donde por primera vez no asistió el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, el ministro indicó que en este Teatro de la República cada 5 de febrero espera a que los Poderes de la Unión, de cuerpo presente, rindan cuenta del ejercicio de su juramento constitucional.

“El Poder Judicial de la Federación cumple su cita y da cuenta puntual de su encomienda con independencia, con autonomía, con honradez, con imparcialidad, libre de remordimientos y siempre comprometido con su vocación democrática. No lo duden ni un momento hay Constitución, que viva la Constitución de México”, finalizó.

Alcalde: se impulsa un pacto social con humanismo

Con la ausencia del Presidente, la secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde encabezó la ceremonia conmemorativa del 107 aniversario de la promulgación de la Constitución, donde aseguró que las reformas que enviará Andrés Manuel López Obrador, representan el regreso del “pacto social” con el humanismo mexicano impulsado por la Cuarta Transformación.

En el Teatro de la República de Querétaro, donde por primera vez no asiste un Presidente a la ceremonia, Alcalde denunció que hasta la Carta Magna llegó el neoliberalismo, donde durante 36 años se le cambió su sentido social.

“Hasta la Constitución llegó el avasallante neoliberalismo, y se crearon en ella aparatos para proteger intereses privados sobre los públicos. Llegaron las privatizaciones (…) se trastocó así el sentido social de la propia Constitución”, afirmó ante los representantes de los Poderes Legislativo y Judicial, así como del gabinete de seguridad, gobernadores, senadores y diputados.

“Las reformas que conoceremos hoy y que vamos a conocer esta tarde junto con la de los últimos años son las del camino del regreso al pacto social fundamentado desde el pacto federal.

“Un nuevo pacto social con la llegada del humanismo mexicano a la Constitución, la salvaguarda de los derechos sociales, educación, salud y salario; la solidaridad como principio colectivo, una idea más amplia del desarrollo y del bienestar social. Lo que los liberales de 1917 y de toda las épocas y de todos los rincones de la patria han anhelado para nuestra Constitución”, dijo.

La titular de Gobernación calificó este lunes 5 de febrero como un día histórico para la arquitectura constitucional de México, ya que a más de 100 años de distancia, es cierto que se han ampliado derechos individuales y reconocido derechos colectivos, a pesar de sus múltiples modificaciones que sufrió en ese tiempo.

Subrayó que se instauró en la Carta Magna la mala idea de construir el bienestar desde arriba y con exclusiones.

Por lo anterior, defendió las reformas que el Presidente Andrés Manuel López Obrador envió al Congreso de la Unión.

En ese sentido, manifestó que estará en la ley suprema elevar a rango constitucional la obligación del Estado para proteger a la población más vulnerable, y devolverle el sentido al artículo 39: Todo poder público dimana del pueblo.

“El humanismo mexicano es el derecho a ser feliz, a tener oportunidad a la inclusión desde abajo y para todos, al reparto equitativo de los esfuerzos y bienes sociales, a sostener una economía próspera que fecunde una sociedad más justa. Estará en la Constitución, para blindarlo de toda amenaza de retroceder, que el Estado es el garante de la protección de los derechos sociales”, añadió.

Luisa María Alcalde estableció que a partir de las propuestas de este 5 de febrero, “vamos a tener la oportunidad para poder lograr el anhelo de Francisco Zarco, la igualdad será desde hoy la gran ley en la República”.

La encargada de la política interna del país agregó que en la Constitución se dejará en claro al mundo que, en México, la Cuarta Transformación tiene una concepción política de trascendencia histórica.

Legisladoras destacan división entre poderes

La presidenta de la Cámara de Diputados, Marcela Guerra, se pronunció por dar plenitud a la división de contrapesos entre los poderes y del papel que juegan las instituciones autónomas, para consolidar una República democrática, laica y federalista donde se acote el presidencialismo que conjure e impida el riesgo de una exacerbación autoritaria.

“Dentro de este ámbito, el imperativo de animar la democracia deliberativa en la vida del Congreso y en la dinámica de las relaciones entre sociedad y Gobierno, también la obligación de consolidar el régimen democrático en el marco de una transición que perfecciona las normas electorales, pero que debe poner énfasis equivalente en el régimen de gobierno para establecer así un presidencialismo acotado que conjure e impida el riesgo de una exacerbación autoritaria.

“De ahí la imperiosa necesidad de prospectar la más cabal expresión de nuestro federalismo y para impulso del desarrollo de las comunidades y de las regiones del país dentro de la consolidación de la soberanía de todos los estados y evitar los intentos centralistas que siempre están al acecho”, aseguró la legisladora priista.

Al participar en la conmemoración del 107 aniversario de la promulgación de la Constitución de 1917, Guerra Castillo dijo que se debe aprender de ese legado para transmitirlo por el bien de la patria, que busca afirmarse a través del régimen de libertades, del Estado de derecho, de una democracia que se asiente en los grandes acuerdos, en un sistema plural y competitivo.

En contraste, la presidenta del Senado, la morenista Ana Lilia Rivera, dijo que esta conmemoración también marca el final de la 65 Legislatura, dominada por una mayoría parlamentaria que refleja los tiempos de cambio que vive el país: una revolución pacífica, democrática y popular. Enumeró que desde el 2018, el Poder Legislativo aprobó 23 decretos de reforma constitucional, 62 artículos de la Constitución inspirados en el humanismo mexicano y en la nueva rectoría política de austeridad republicana.

Precisó que la Constitución es, además, una brújula moral y guía en tiempos de desafíos, pues no se trata de un documento estático, sino, por el contrario, un testamento dinámico de la constante transformación como sociedad.

“No olvidemos que durante 36 años el modelo neoliberal fue impuesto en México por una minoría oligarca y antidemocrática que impuso reformas a nuestra Constitución para privilegiar el saqueo de nuestra riqueza nacional. A la Constitución la despojaron de casi todos sus principios y espíritus originales”, externó.

Añadió que todas las modificaciones, reformas estructurales o del Estado, “como le llamaron”, no fueron otra cosa que la entrega de la soberanía alimentaria, energética y económica, entre otros.

Destacó que la actual Legislatura, que concluye sus funciones, detuvo el desmantelamiento del Estado mexicano: “Hemos dado nuevos bríos a la convivencia política, al funcionamiento de una verdadera división de poderes y a la institucionalidad de nuevos derechos. Celebremos hoy no sólo un aniversario, sino la continuidad de un legado”.

Gobernador llama a la unidad y la tolerancia

Frente a la proximidad del proceso electoral del 2 de junio, el gobernador de Querétaro, Mauricio Kuri, hizo un llamado a la unidad, la mesura y la tolerancia, ya que una elección, dijo, no es una confrontación entre hermanos.

“No hay mejor momento que este para hacer un llamado a la mesura, convocar a la unidad, a la reflexión (…) Una elección no es una confrontación entre hermanos. Desde aquí convocamos a la unidad y la concordia, al respeto y a la tolerancia. Demostremos con nuestra actitud que seguimos celebrando la Constitución de la mejor forma: guardarla y hacerla guardar”, expresó.

En su mensaje en la conmemoración del 107 aniversario de la Constitución de 1917, el mandatario panista opinó que la democracia y la libertad siguen la única vía transitable para transformar a México.

Ante los representantes de los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial, así como miembros del gabinete de seguridad y gobernadores, señaló que la gran contribución de la Constitución de 1917 es que garantiza que la población se exprese, organice, critique y vote, donde su sufragio cuente y se respete.

Agregó que la libertad no puede sustituirse bajo la promesa de igualdad y que la democracia no es canjeable por justicia social.

“La historia se repite para aquellos que no aprenden sus lecciones, no es posible tener un país en concordia sin democracia, sin libertad y tampoco sin justicia social. Libertad e igualdad no se contraponen, se complementan; democracia y reforma social sólo sobreviven si van juntas. La confrontación en México siempre ha sido brutal”, refirió.

Kuri González resaltó que ayer, como hoy, las familias anhelan la pacificación del país; por ello, “ya no más”.

Carta Magna, con 769 reformas hasta hoy

La Constitución mexicana registra 769 reformas hasta la actualidad, las cuales han permitido reconocer otro tipo de derechos que hace más de un siglo no se consideraban, destacó Francisco Burgoa Perea, especialista y académico de la Facultad de Derecho de la UNAM.

La Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos que nos rige fue promulgada el lunes 5 de febrero de 1917. “En ese entonces tenía más de 70 mil palabras y fue considerada la más avanzada del mundo por el reconocimiento a los derechos sociales; no obstante, ha sabido adaptarse y adecuarse a los requerimientos de la sociedad mexicana”, afirmó Burgoa Perea.

En 107 años ha tenido 769 reformas que han sido publicadas en 255 decretos en el Diario Oficial de la Federación (DOF), lo que promedia 7.18 enmiendas anuales. De acuerdo con el experto, la Carta Magna mantiene su fortaleza y valor, aun con el número de cambios registrados.

“Inclusive Venustiano Carranza, cuando presenta su proyecto ante el Congreso Constituyente de Querétaro, tenía la idea de sólo reformar la de 1857, no formular una nueva; sin embargo, se incorporaron los derechos sociales, que son los que le van a dar esta posibilidad de que haya sido considerada la más avanzada del mundo”, refirió.

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FGR

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