Pese a que Ómicron es menos letal que otras variantes, las defunciones por Covid-19 en México tuvieron un repunte en 20 estados, de acuerdo con datos de la Secretaría de Salud.
El aumento de defunciones se reflejó a nivel nacional en las dos primeras semanas de enero, después de las fiestas decembrinas; sin embargo, en algunos estados el repunte inició desde inicios de diciembre.
Las entidades que registraron un incremento de fallecimientos son Aguascalientes, Baja California, Baja California Sur, Coahuila, Ciudad de México, Colima, Durango, Estado de México, Guanajuato, Hidalgo y Jalisco.
En una revisión realizada por La Razón, también figuran Nayarit, Nuevo León, Quintana Roo, Querétaro, Sinaloa, San Luis Potosí, Tamaulipas, Yucatán y Zacatecas.
Las defunciones por el virus habían acumulado 19 semanas consecutivas de descenso desde finales de agosto, alcanzando un mínimo de 674 muertes a finales la última semana de diciembre. Sin embargo, para la segunda semana de enero la cifra se elevó a mil 036, lo que representó un aumento de 53.7 por ciento a nivel nacional.
La cuarta ola ha impactado de forma distinta en todos los estados. En Colima, por ejemplo, la entidad logró mantenerse cuatro semanas sin ninguna defunción por el virus. Sin embargo, entre el 9 al 15 de enero fallecieron tres personas por la enfermedad.
El aumento más drástico se registró en la capital del país, que pasó de 28 defunciones en la última semana de diciembre a 119 en la segunda de este mes, un incremento de 325 por ciento en 14 días.
Otro caso es el de Aguascalientes que sumó seis semanas seguidas con un alza en las muertes por el virus. En ese periodo pasó de reportar 11 muertes en una semana a 43 en ese mismo periodo.
El alza de contagios y defunciones se reflejó en el semáforo de riesgo Covid-19, en el que 20 estados estarán entre el color amarillo a rojo; es decir, un riesgo medio a alto de la situación de la pandemia.
En Aguascalientes, la única entidad en rojo, el gobernador Martín Orozco anunció que continuará con medidas para la mitigación de contagios como la reducción del aforo a un 50 por ciento en espacios públicos, eventos privados y centrales de abasto, mientras que los restaurantes, bares y antros cerrarán a las 23:00 horas.
Los casos también alcanzaron la cifra récord entre el 9 al 15 de enero, con 265 mil 123 estimados en una semana, un promedio de 37 mil 874 casos al día.
El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, ha subrayado que la letalidad de la enfermedad por la variante Ómicron es menor; sin embargo, los efectos de la cuarta ola ya se reflejaron en las muertes.
El funcionario expuso que “a lo largo de pocos días se reestablecen después de haber padecido dolor de garganta, tos, a veces fiebre, dolor de cabeza; pero sólo una pequeña minoría, una proporción mucho menor de lo que ocurría con la variante delta, llegan a ser hospitalizados o llegan a fallecer”.
“Si bien es una variante del virus SARS-CoV-2 que se propaga muy rápidamente y produce una gran cantidad de personas enfermas, las personas enfermas en general, en su enorme mayoría tienen síntomas leves, síntomas semejantes a otras enfermedades respiratorias”, expuso durante el pulso de la salud de la semana pasada.
