En el país hay 24 ductos de gas natural y 5 de transporte de gas LP que suman alrededor de 18 mil kilómetros de gasoductos a través de 27 de las 32 entidades federativas, lo que supone un riesgo para la población, ante el incremento de las tomas clandestinas, donde algunas han generado tragedias como la ocurrida este 31 de octubre en Puebla.
De acuerdo con el mapa interactivo de la infraestructura de gas natural en México, el cual sólo indica tramos aproximados con fines informativos, la mayoría de los ductos se cruza en el centro y oriente del país, pasando por estados como Hidalgo, Veracruz, Puebla y el Estado de México, los cuales fueron señalados como los puntos donde se registraron más perforaciones de los ductos de gas LP durante el primer trimestre del 2021, según el Instituto para la Gestión, Administración y Vinculación Municipal.
Tan sólo en el Estado de México, estos gasoductos pasan por municipios altamente poblados como Tecámac, cuya población es de 547 mil 503 habitantes y que, además, atraviesa el Circuito Exterior Mexiquense, una de las vialidades más utilizadas, al conectar con 18 municipios y con autopistas radiales como la México-Querétaro, México-Pachuca, Peñón-Texcoco y México-Puebla.
Debido al crecimiento de la mancha urbana, varias zonas habitacionales se ubican cerca de estos ductos, como es el caso de la colonia Ojo de Agua, Tecámac, en donde ya se han observado tomas clandestinas sobre la calle Paseo de las Carretas, a sólo unos metros de la preparatoria “Jorge Jiménez Cantú”.
Por otro lado, el paso del poliducto Cactus-Guadalajara, en el municipio de Nextlalpan, se encuentra cerca del fraccionamiento Paseos del Valle y en cruces importantes como Canal del Desagüe y Hacienda Santa Inés, también cerca del Circuito Exterior Mexiquense.
Otras comunidades en riesgo son las de San Juan y La Purísima, en San Martín Texmelucan, Puebla, que se encuentran entre los límites con Tlaxcala y cuentan con unidades habitacionales y diversos comercios. En este municipio, alrededor de 300 personas fueron evacuadas en febrero del 2021, debido a una toma clandestina.
En Santa María Azcapotzaltongo, Hidalgo, más de 200 familias fueron desalojadas el pasado 6 de octubre, luego que se formó una nube de gas LP a causa de una toma clandestina.