Emilio Lozoya, extitular de Petróleos Mexicanos (Pemex) acusó una red de corrupción en el caso de sobornos de la constructora brasileña Odebrecht e involucró a 17 exfuncionarios, —3 expresidentes, 3 exsecretarios de Estado, 6 exsenadores, un exdiputado federal y exdirectores de la paraestatal —; además de señalar que Enrique Peña Nieto y Luis Videgaray buscaron enriquecerse al amparo del poder a través de una asociación de corte delictivo con extorsión, fraude y engaño.
En la denuncia que presentó ante la Fiscalía General de la República (FGR), que se divulgó ayer por la tarde, Lozoya Austin dice que cuando ingresó a la campaña presidencial del PRI, en 2012, el entonces precandidato Enrique Peña Nieto y su coordinador de campaña, Luis Videgaray, le encomendaron gestionar recursos con la empresa brasileña para cubrir diversos pagos a consultores extranjeros.
En el documento de 63 páginas, detalla que por instrucción de Videgaray, se reunió con Luis Weyll, director de Odebrecht en México, para que apoyara la campaña presidencial con 6 millones de dólares.
“En la reunión que sostuve a principios de 2012 con Luis Weyll, en Prado Sur, en la que le pedí 6 millones de dólares americanos me mencionó que la cantidad que la empresa podría aportar a la campaña sería de cuatro millones de dólares”, se lee en la denuncia.
De esos recursos, Odebrecht depositó tres millones 150 mil dólares en la cuenta de una empresa en Suiza propiedad del mismo Lozoya, Latin America Asia Capital Holding ltd y que actualmente figura como beneficiaria su hermana Gilda Susana Lozoya Austin. El resto los iba a poner Fabiola Tapia Vargas, socia de Odebrecht.
“Posteriormente ella le daría a Luis Weyll una cuenta para que se los depositaran a ella”, asegura el extitular de Pemex.
Del dinero que Odebrecht depositó, mil 600 millones se usaron para pagar, entre el 4 de mayo y el 20 de junio, a 10 consultores extranjeros de la campaña presidencial, a quienes se les pidió facturar con servicios diferentes.
“Si esas facturas mencionaban la campaña se les solicitaba que hicieran otro tipo de facturas que tuvieran que ver con prestación de servicios diferentes a los señalados. De esta forma, los programas de compliance que operan al interior de las entidades bancarias no detectaban anomalías ni ponían trabas a los movimientos bancarios”, dice Lozoya.
El resto, un millón 500 mil dólares fueron para Lozoya Austin, quien los depositó a la empresa de su propiedad, Tochos Holding Limited.
SALPICA A ANAYA, PENCHYNA…
En una segunda parte de la denuncia, el exdirector de la paraestatal habla de la planeación para la aprobación y compra de votos de las reformas estructurales. Narra que recibió instrucción de Peña Nieto y Videgaray para entregar “montos importantes de dinero a la oposición para que ésta votara a favor” y que debía estar cerca de los legisladores que tuvieran interés por la reforma energética. Los recursos que se utilizarían serían los 850 mil dólares que dio en efectivo Fabiola Tapia.
Lozoya narra que Peña y Videgaray establecieron como enlace de este tema a David Penchyna, entonces presidente de la Comisión de Energía del Senado.
De acuerdo con el expresidente de Pemex, la entrega de dinero a los legisladores se hizo en las instalaciones de la Cámara de Diputados, y ascendieron hasta 80 millones de pesos que se entregaron en efectivo y se liberaban conforme lo indicaba Videgaray.
“Recibí en diversas ocasiones a los legisladores de oposición cuyas exigencias ascendían, en un primer momento, hasta 50 millones de dólares para dar su voto a favor de la reforma energética. Los recursos se les asignaban según iban avanzando las negociaciones”, dice.
Además, Videgaray le ordenó entregarle al entonces diputado Ricardo Anaya seis millones 800 mil pesos para que avalara la reforma energética.
También señala a varios legisladores de haber incurrido en presiones contra él, mismas que interpreta como extorsión.
“La actitud de los panistas en obtener recursos era brutal, por ejemplo, además de extorsionarme, presionaban y extorsionaban a los grupos gasolineros y diversos contratistas de Pemex.
En ese punto menciona los nombres de Francisco Javier García Cabeza de Vaca, Francisco Domínguez Servién, Salvador Vega Casillas y Jorge Luis Lavalle Maury.
Más adelante, Lozoya habla de que la red de corrupción de Odebrecht también se dio en el gobierno de Felipe Calderón y detalla que incluso el dueño de la empresa brasileña, Marcelo Odebrecht acudió con una comitiva a comer a Los Pinos.
La constructora, declaró, dio sobornos a la administración panista para obtener el contrato de Etileno XXI, una planta transformadora de Etano en plástico. El contrato incluía la entrega de Etano a 25% por debajo de los precios del mercado.
En esa negociación participaron, de acuerdo con Lozoya, los entonces ejecutivos de Pemex, Carlos Treviño Medina, José Antonio González Anaya y el secretario de Hacienda, José Antonio Meade.
Refiere que tras confirmarse la continuidad de Etileno XXI ya con Peña Nieto, se entregaron 84 millones de pesos. En este punto involucra al secretario de finanzas del PRI, Luis Vega Aguilar y a Rafael Caraveo.
Igualmente da cuenta de que el entonces senador del PRD, Miguel Barbosa, hoy gobernador de Puebla solicitó la adscripción de su hermano que laboraba en Pemex.
El expresidente Carlos Salinas de Gortari también fue señalado por Lozoya como la persona que cabildeó a favor de diversos proyectos relacionados con Pemex.
Lozoya también aseguró que Grupo Higa fue la empresa encargada de la construcción de una casa en el estado de México para Peña Nieto, la cual contaría con un Museo del Presidente.
En su denuncia detalló que Peña “lo instruyó a coordinarse con el secretario técnico del gabinete, Roberto Padilla Domínguez, para que Pemex contratara los servicios de un fotógrafo, quien se encargaría de los eventos relevantes del mandatario”.
En esta parte del escrito, Lozoya revela que el exgobernador de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa, actualmente preso en el Reclusorio Norte, le regaló a Peña Nieto un automóvil Ferrari que, supuestamente, fue propiedad del expresidente Adolfo López Mateos.
Fiscalía General indaga la filtración del documento
La fiscalía General de la República (FGR) aclaró que la filtración de la denuncia presentada por el exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex), Emilio Lozoya no fue proporcionada por la institución a ningún medio de comunicación.
Mediante una breve tarjeta de prensa, la FGR dijo que la denuncia, que circuló profusamente en medios de comunicación fue liberada de forma ilícita por lo que “abrió la carpeta de investigación correspondiente y citará a quienes hayan tenido acceso a ese documento para realizar todas las diligencias ministeriales necesarias”
La dependencia federal también solicitó a los medios de comunicación que revelen quien entregó el documento. “Invitamos también a quienes la recibieron para que proporcionen el origen de dicho envío”, dice.
A su vez, la defensa de Lozoya también se deslindó de la difusión del documento.
El despacho del abogado del extitular de la paraestatal, Miguel Ontiveros, manifestó que los asuntos del orden penal deben desahogarse ante las instituciones del Estado.
- El dato: Gilda Margarita Austin y Solís, madre del extitular de Pemex, descartó el lunes continuar con amparo, enfrentará su vinculación a procesocomo supuesto lavado de dinero.
Con información de Javier Chávez