Entre amparos, juicios laborales e incertidumbre y vacíos de comunicación, el Partido de la Revolución Democrática (PRD) nacional pelea por quedarse con su sede histórica y con dos inmuebles más, de los siete que constituyen su patrimonio de bienes inmobiliarios.
De acuerdo con los registros oficiales, el sol azteca cuenta con siete inmuebles de su propiedad que van a estar entre los bienes que se le puedan quitar a la fuerza política al retirarle el registro.
La primera de ellas es la sede histórica en Monterrey 50 en la colonia Roma, en la Ciudad de México, con un costo de 25.4 millones de pesos, a la que se suma la actual sede nacional en Benjamín Franklin en la zona de Patriotismo, con un valor estimado de 160 millones de pesos.
Otras instalaciones del PRD son Durango 338 y Bajío 16 en la Roma; Odontología 16, en Copilco Universidad, así como Refinería Minatitlán 22 y 26 en la colonia Petrolera, Taxqueña.
No obstante, el dirigente nacional, Jesús Zambrano Grijalva, aseguró que salvarán al menos tres de las sedes, ya que fueron compradas con donaciones y recursos de militantes: Monterrey 50, Durango 338 y Odontología 16.
En entrevista con La Razón, explicó que el proceso aún no concluye, lo que puede tardar al menos tres a cuatro semanas más. “Hay que esperar el término del procedimiento y lo que vaya decretando el Instituto Nacional Electoral (INE) en cada momento. Los inmuebles son de varios cientos de miles de pesos que cuentan, como todas las propiedades que tiene el PRD, pero algunas de ellas, como Monterrey, Durango y Odontología, no fueron compradas en su momento con prerrogativas oficiales, sino con donativos especiales y cuotas de militantes”, sostuvo.
Por ello, aseguró que esas propiedades no se las pueden quitar y no deben quedar incautadas, ya que no pertenecen a las arcas nacionales; sin embargo, ante la pérdida del registro, la incertidumbre persiste sobre quién se las pueda quedar.
Zambrano Grijalva aseveró que el interventor asignado para analizar los bienes del PRD no se ha comunicado con ellos ni les ha dado a conocer cómo va el tema, y por ello esperan que sea en las siguientes semanas cuando se dé a conocer a detalle el siguiente proceso, una vez que se acaben todos los recursos legales que han interpuesto.
Mientras esto ocurre, de manera paralela y en la recta final de la existencia de este partido, se prevé que la liquidación de secretarios y dirigentes comenzará a partir de la última semana de septiembre o la primera de octubre, una vez que sea dada a conocer la notificación oficial de que perdió el registro.
Políticos de la jerarquía del sol azteca dijeron a La Razón que la información ha estado “sumamente cerrada” entre los dirigentes y los secretarios, pues en realidad desconocen en qué etapa de la liquidación se encuentren, ya que algunos de sus representantes hasta dejaron de contestar los teléfonos.
Hay que esperar el término del procedimiento y lo que vaya decretando el Instituto Nacional Electoral (INE) en cada momento. Los inmuebles son de varios cientos de miles de pesos que cuentan, como todas las propiedades que tiene el PRDJesús Zambrano, Dirigente nacional del PRD
“Literalmente hay cero comunicación entre la dirección nacional. No nos han llamado para nada, el único que tiene algún tipo de comunicación es el de finanzas. Yo investigué por fuera, con gente del interventor y del INE. Están esperando la resolución de un amparo, del que no nos avisaron, pero lo de la impugnación ya fue resuelto y se perdió el registro”, explicó uno de los secretarios de confianza, que no quiso que se dé a conocer su nombre.
De esta forma, explicó que se espera que se agoten todos los recursos interpuestos para, en una sesión del Consejo General, darlo a conocer, aunque aclaró que realmente no hay nada que hacer, ya que el registro está perdido.
“Como todavía no tenemos declaratoria, los dirigentes estamos en la nómina y tengo entendido que nos van a pagar hasta septiembre; por ello, en la última semana de ese mes nos van a liquidar o a principios de octubre. Solamente es la dirección nacional como tal, secretarios y dirigentes”, explicó.
Además, uno de los empleados de confianza del sol azteca dijo a este diario, de manera anónima, que existen algunos juicios laborales en proceso contra el partido, debido a que los trabajadores piden más dinero del que les dieron en su liquidación.
“Están demandando por más dinero, pero en el PRD no te dejaban tener antigüedad, ya que los contratos eran por seis meses y pues no hay mucho que reclamar”, explicó.
Añadió que recientemente hubo recontratación, pero sólo del agente que lleva finanzas y eso es para cerrar y “cuadrar” las cifras antes de que les quiten todo.