De acuerdo con una nueva investigación de la Federación Internacional de Diabetes (FID), en México 4 de cada 10 mexicanos padece diabetes de algún tipo; pero de ese número solo uno es atenido de manera adecuada; ello deriva del costo de la enfermedad, ya que no todos tienen acceso a la insulina, que resulta vital para el tratamiento, además 47.5 por ciento de diabéticos no han sido diagnosticados.
La doctora María Elena Sañudo, directora Médica de la Unidad de Medicinas Generales de Sanofi México, dijo que “al segundo trimestre del presente año, en el país se registraron 20,330 ingresos de pacientes con diagnóstico de Diabetes Mellitus Tipo 2. En Sanofi, trabajamos incansablemente para reforzar la educación acerca de la diabetes y generar una cultura de conciencia de como alimentarse y recibir el tratamiento adecuado”.
La doctora recordó que México ocupa el séptimo lugar a nivel mundial con mayor número de personas viviendo con diabetes. “En ese sentido, la Diabetes Mellitus Tipo 2 es la enfermedad con una alta prevalencia en el país” y de acuerdo con los datos de la FID, los estados que reportaron mayor incidencia fueron: Tabasco, Jalisco y Puebla.
Asimismo la especialista dijo que la diabetes ha emergido como una de las principales preocupaciones de salud de forma global. Se estima que aumentará al 11.3 por ciento en 2030 (643 millones) y al 12.2 por ciento (783 millones) en 2045.
“El impacto del padecimiento es multifacético y llega a desencadenar complicaciones médicas graves, como trastornos cardiovasculares, neuropatías y problemas de visión que a largo plazo generan un impacto en la estabilidad financiera de las familias y en los sistemas de atención médica; eso incluye el desarrollo de nuevas herramientas y no solo el buen uso de la insulina, que se les puede proveer a los pacientes, por ello es que hemos desarrollado herramientas tecnológicas como "My Dose Coach" y "Entregando Salud Pacientes" que brindan apoyo para controlar el seguimiento de este padecimiento’’, dijo.
Por su parte Sergio Alberto Mendoza Álvarez, académico de la División de Estudios de Posgrado de la Facultad de Medicina de la UNAM, dijo que “solo tres de cada diez pacientes diabéticos tiene adecuado control de la enfermedad”.
El médico internista señaló que según datos de la Encuesta Nacional de Salud (Ensanut) 2022, la prevalencia diagnosticada en México fue de 12.6 por ciento, mientras que los no detectados clínicamente fueron 5.8 por ciento, es decir, 18.4 por ciento de la población mayor de 20 años la presenta.
“La influencia del mundo occidental en relación con la alimentación, ha provocado cambios en los hábitos alimenticios de la población mexicana. Además, el impacto comercial que vivimos en redes sociales, nos llevan al consumo de alimentos con bajo nivel nutricional y altos índices glucémicos, como las papas fritas, refrescos, pan, pastas y harinas, entre otros, que generan sobrepeso y de ahí que las comorbilidades más importantes en los diabéticos sean obesidad, daño renal, colesterol alto y las enfermedades cardiovasculares”, dijo.
La Ensanut señala que un 28 por ciento, incluso se habla de un 40 por ciento, de las personas que viven con diabetes tienen daño renal, 30 por ciento colesterol alto y, por lo menos, un 30 por ciento más tiene sobrepeso u obesidad.
Mendoza indicó que para el tratamiento adecuado que la mayoría no reciben “hay dos llaves maestras: el deporte es una no farmacológica que abre la puerta para que entre la glucosa entre los tejidos y se ocupe como energía, en lugar de acumularse en la sangre; la otra es farmacológica, es decir, la metformina, medicamento antidiabético, para coadyuvar a disminuir la resistencia a la insulina, y facilita que la glucosa finalmente sea ocupada por cada uno de los órganos”.
Destacó que uno de los desafíos para el sector salud es identificar a tiempo la enfermedad. “Esto es fundamental, si no tenemos un diagnóstico oportuno nos traerá complicaciones renales y cardíacas que son costosas de tratar, por ejemplo una intervención quirúrgica de tipo cateterismo para destapar la arteria”.
Finalmente Valney Suzuki, director general de Novo Nordisk México, compartió que además de ser una urgencia sanitaria prioritaria, la diabetes es un problema de salud pública que ocasiona una carga económica lacerante para el paciente, las familias y el sector salud, sobre la que la Fundación Mexicana para la Salud (Funsalud), estima que equivale cuando menos al 2.25 por ciento del producto interno bruto (PIB), principalmente por el costo de las complicaciones y es que advierte los costos de la insulina en el mercado no son costeables para el enfermo, pues los precios van desde 700 a 4500 pesos, dependiendo de cada caso.
JVR
