El dirigente de la organización Pueblo Sin Fronteras, Irineo Mujica, aseguró que la detención y deportación de al menos 25 migrantes en el albergue de Piedras Negras, Coahuila, es un suceso que pudo prevenirse, ya que las autoridades tienen todos los documentos e informes de los centroamericanos como para que se haya salido de control.
“¿No tienen sus documentos? Aparte de qué habla, si en el estado hay altos índices de violencia. Está preocupado por 25 maras; es ridículo porque ningún mara tiene poder en México, todo lo tiene el narco”, destacó.
En entrevista para La Razón, sostuvo que migración es la que se encarga de detectar a los integrantes de pandillas sudamericanas, por ello, aseguró que alguien no está haciendo su trabajo al dejar que pasen por las fronteras.
“¿No tienen sus documentos? Aparte de qué habla, si en el estado hay altos índices de violencia. Está preocupado por 25 maras; es ridículo porque ningún mara tiene poder en México, todo lo tiene el narco”
Irineo Mujica
Dirigente de Pueblo Sin Fronteras
Por otra parte, denunció que la detención de dos integrantes de su organización en el deportivo Magdalena Mixhuca de la Ciudad de México es un acto arbitrario que criminaliza y hostiga a los defensores de derechos humanos por parte de las autoridades capitalinas.
Mujica dijo que elementos policiales de la capital atacaron de manera premeditada y haciendo uso excesivo de la fuerza a los Defensores de Derechos Humanos Andrea González, Andrea Margarita Nuñez Chaim, Cristóbal Sánchez y Denis Omar Contreras, este último migrante de nacionalidad hondureña, violando de manera premeditada los derechos de cada uno de ellos.
Indicó que los detenidos estaban platicando a las afueras del estadio Jesús Martínez Palillo, cuando los agentes del orden llegaron a agredirlos físicamente.
“Denunciamos la clara estrategia del Gobierno mexicano en conjunto con el gobierno de Estados Unidos para criminalizar, perseguir, violentar y poner en riesgo las vidas de los Defensores de Derechos Humanos de los pueblos migrantes y así mismo para criminalizar la ayuda humanitaria”.