El adiestramiento en el Ejército y Fuerza Aérea Mexicana es un ejercicio obligatorio para los integrantes de las Fuerzas Armadas y se lleva a cabo en diversos centros de capacitación distribuidos en toda la República Mexicana, pero la base militar Santa Gertrudis, ubicada en Chihuahua, es uno de los más importantes, pues aquí se ubica el Centro Nacional de Adiestramiento (CNA).
Este fin de semana, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) presentó ahí la cuarta y quinta fase de este adiestramiento, que corresponden al manejo de armas combinadas y operaciones conjuntas, respectivamente, en un evento en el que estuvieron presentes la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez; el titular de Sedena, Luis Cresencio Sandoval, y el almirante secretario de Marina, José Rafael Ojeda.
Esta actividad, que desde el año de 1999 se ha realizado 28 veces, adiestra en un total de cinco fases a los individuos responsables de defender al país de ataques extranjeros, invasiones y corporaciones dedicadas al crimen organizado, y por primera vez, desde que fue creada, el 26 de marzo del 2019, la GN tuvo participación en este ejercicio conjunto con el Ejército y la Fuerza Aérea Mexicana.
Para la presentación de estas dos fases, Sedena utiliza una representación de una zona rural y lleva a cabo la simulación de la detención de El Gavilán, cabecilla del crimen organizado que ha tomado el control del pueblo.
Este ejercicio se divide en etapas y muestra la captura del criminal, la puesta a disposición del objetivo capturado por elementos de la Guardia Nacional y los escenarios desatados por la captura, como lo son las revueltas de los pobladores, que en ocasiones son amenazados por estas células delictivas para responder agresivamente contra las FA, el uso de drones bomba y las reacciones de los comandos de las organizaciones delictivas.
Con helicópteros, vehículos blindados y armas Barret para repeler agresiones aéreas y equipo de uso exclusivo del Ejército, un total de seis mil 237 elementos de la Fuerza Aérea, Ejército y Guardia Nacional realizan esta simulación.
La agente Jaramillo, de 24 años de edad, pertenece al grupo de Fuerzas Especiales de la Guardia Nacional y cuenta su sentir a La Razón: “Es muy bueno (el adiestramiento); nos enseña a relacionarnos con la gente y tener más contacto con la ciudadanía, siempre respetando sus derechos”.
La agente también hizo un llamado a la ciudadanía para confiar en la GN, pues “justicia y paz” es su objetivo para el país.