Con nueve votos a su favor, Guillermo Valls Esponda fue elegido como el nuevo presidente del Tribunal Federal de Justicia Administrativa (TFJA) para el trienio del 2023 al 2025.
El resultado arrojado en la primera ronda de votación, ubica al magistrado, quien fungía como presidente de la Primera Sección de la Sala Superior del Tribunal, como el sucesor de Rafael Anzures Uribe.
La decisión se tomó, además de la postulación de Valls Esponda, entre la aspiración al mismo cargo de Luz María Anaya Domínguez y Julián Olivas Ugalde, según el magistrado decano Manuel Luciano Hallivis.
Dentro de su propuesta de trabajo integrada por ocho puntos, se comprometió, en inicio, a intensificar el uso de tecnologías de la información y comunicaciones, ante la constante actualización de sistemas tecnológicos.
También propuso distribuir con eficiencia las cargas de trabajo en las salas regionales, para garantizar la impartición de justicia administrativa y establecer políticas para disminuir el estrés laboral en el tribunal.
A esto, agregó el agilizar el desahogo de asuntos en trámite, para acelerar su resolución, mediante un estudio sobre el rezago y las causas de dilación excesiva.
Con ello, propuso la creación de nuevas plazas para disminuir las cargas de trabajo; sin embargo, esto se dará cuando haya disposición presupuestal.
“El objetivo de combatir el rezago jurisdiccional no solo se trata de recortar procesos administrativos, sino también de estandarizarlos y transparentarlos, de modo en que quienes acudan al Tribunal gocen de plena certeza sobre las distintas etapas, procesos, así como de los tiempos estimados para desahogarse sin contravenir la calidad de la sentencia”, dijo en la sesión.
De igual forma propuso impulsar el servicio profesional de carrera “para sumar a la credibilidad y legitimación de las decisiones del Tribunal”.
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