El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) consolidó el Programa Integral de Salud Mental a través de la detección de trastornos a distancia y los módulos PrevenIMSS, los cuales están dirigidos a derechohabientes y personal de salud.
El director del instituto, Zoé Robledo, recordó que desde 2020, la Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió a las instituciones sobre los primeros impactos de la pandemia de COVID-19 frente a la atención médica, seguido de "la carga de estrés, dolor, angustia y desesperación, por ello, la urgencia de considerar la salud mental como un componente fundamental de la respuesta a la pandemia".
Robledo detalló que el IMSS incorporó a los equipos de salud mental a 334 psicólogos para poner en marcha un plan de acción que coadyuva en la atención y la promoción a la salud mental, y que busca ampliar los servicios y garantizar el acceso equitativo a los tratamientos que ofrece el Seguro Social.
En su intervención, la doctora Célida Duque Molina, directora de Prestaciones Médicas, indicó que en los servicios del IMSS los trastornos mentales y del comportamiento ocupan el séptimo lugar como motivo de consulta. "Anualmente otorgamos cinco millones de atenciones a nivel nacional y el 80 por ciento de ellas se otorgan en las Unidades de Medicina Familiar".
"Estamos avanzando en el camino hacia un sistema de salud con oportunidad, calidad, equidad, accesibilidad en la atención, con un trabajo colaborativo" que rompe esquemas, que suma talentos y promueve una visión de cambio en el beneficio de las sociedades, manifestó.
La estrategia se dio a conocer en el Congreso Internacional de Salud Mental, que se realiza del 8 al 10 de diciembre con la participación de 12 países, 15 instituciones académicas y organismos internacionales.
KEFS