En poco más de un mes, 3 mil 968 derechohabientes del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) han sido transferidos a hospitales privados para recibir atención médica a raíz de la reconversión de unidades hospitalarias por COVID-19.
Lo anterior forma parte del convenio para la subrogación de servicios médicos firmado por el gobierno federal, la Asociación Nacional de Hospitales Privados y el Consorcio Mexicano de Hospitales, señaló el IMSS en un comunicado.
Derivado de este convenio, de los 357 hospitales privados que aplicaron al programa 212 fueron aprobados por el Consejo de Salubridad General y prestan sus servicios a nivel nacional.
Las entidades en las que se han otorgado el mayor número de atenciones en hospitales privados del 23 de abril al 26 de mayo son la Ciudad de México con 746, Jalisco con 504, Guanajuato con 434, Querétaro con 293 y Morelos con 230.
La mayor parte de servicios médicos se ha destinado a partos, embarazos y puerperios con 2 mil 964; 604 cesáreas; 58 problemas de apéndice; 91 de hernias; 24 úlceras gástricas y duodenales; 175 cirugías endoscópicas urológicas y 649 procedimientos no especificados. Además, 2 mil 581 derechohabientes han sido dados de alta.
La ocupación en este método de subrogación indica que de las tres mil 358 camas en hospitales privados, dos mil 996 son ocupadas por derechohabientes del IMSS, mientras que el resto son pacientes del ISSSTE, Sedena, Insabi y Pemex.
