PAN cuestiona destino de recursos acordados

Llaman a abrir información sobre contrato con UNOPS

Líder de Morena plantea revisar acuerdo para abasto de medicinas y verificar qué impidió cumplir metas; panista Éctor Jaime pide aclarar gasto de "fortalecimiento de instituciones"; asegura que agencia de ONU batallaba con indecisiones de Insabi; Imco: fin de convenio genera dudas sobre compras consolidadas; en clínicas disminuye desabasto

Llaman a Insabi a aclarar reforzamiento del sector
Llaman a Insabi a aclarar reforzamiento del sector Foto: Especial

A demás del destino financiero y resultados para el abasto de medicamentos e insumos, la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS) y el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) también deben aclarar el gasto relativo al fortalecimiento de instituciones que, según el acuerdo firmado entre éstas en el 2020, hasta este año, sería de hasta tres millones 750 mil dólares.

En entrevista con La Razón, el diputado del PAN, Éctor Jaime Ramírez Barba, señaló que esta es una partida poco cuestionada dentro del convenio que el Gobierno estableció con la UNOPS.

En el apartado de los costos directos del proyecto se establece un renglón de provisiones para acciones de fortalecimiento institucional de entidades mexicanas y que se encuentra dentro del presupuesto estipulado por más de seis mil millones de dólares para la implementación de todo el proyecto hasta el 2024.

“En palacio todo es más despacio, y más cuando este tema, de manera originaria, fue señalado como confidencial. Realmente, sobre los millones que se pagaron, que no fueron dos pesos, ¿ese fortalecimiento sirvió de algo?, ¿les dieron un software?, ¿les mantuvieron?, ¿los capacitaron? ¿qué aprendió el Gobierno mexicano a cambio de eso?”, cuestionó.

En palacio todo es más despacio, y más cuando este tema, de manera originaria, fue señalado como confidencial. Realmente, sobre los millones que se pagaron, que no fueron dos pesos, ¿ese fortalecimiento sirvió de algo?, ¿les dieron un software?, ¿les mantuvieron?, ¿los capacitaron? ¿qué aprendió el Gobierno mexicano a cambio de eso?
Éctor Jaime Ramírez Barba, Diputado del PAN

El legislador sostuvo que “sabe” que el Gobierno de México no aceptó ningún sistema por parte de la UNOPS.

“Más bien, UNOPS batallaba con el Gobierno mexicano, que le cambiaba las reglas a cada rato. En ‘radiopasillo’ se dice que mandaban a comprar equis cosas y luego decían: ‘aguántame tantito, te voy a cambiar el pedido’. ¿Imagínate el desastre que significa, con millones de medicamentos, que te cambien el pedido? La UNOPS te lo comenta en el pasillo, pero no lo reconoce públicamente”, expuso.

A raíz de que en el acuerdo se estableció que el órgano de las Naciones Unidas no podría revelar ninguna información confidencial, es que el grupo parlamentario del PAN presentó una iniciativa para reformar la Ley de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios del Sector Público, a efecto de que se garantice la transparencia en cualquier tratado de compra con entes internacionales, dijo.

Y es que, en la modificación aprobada por Morena en el 2020, se estableció que la adquisición de bienes y servicios para la salud que las dependencias contraten con organismos intergubernamentales internacionales, a través de mecanismos de colaboración, quedarían exceptuadas de la aplicación de la ley.

Pero esa ineficiencia lo que genera es muertes, que no haya una distribución, una compra y una distribución de medicinas por corrupción, el que no haya medicinas en México lo que genera es muerte (…) la única salida es que haya estrategia, el problema es que este país tiene hoy a un Gobierno ineficiente
Kenia López Rabadán, Vicecoordinadora del PAN en el Senado

“No puede estarse haciendo eso con el dinero mexicano, no importa cuál sea el organismo internacional, sea quien sea debe ser con transparencia. Nosotros esperamos que la denuncia que en su momento puso (la diputada) María Elena Pérez-Jaén ante la propia contraloría de la ONU, tenga un resultado”, comentó.

Aunado a lo anterior, reclamó el desconocimiento acerca de cómo concluyeron los contratos con las empresas a las que se solicitaron los medicamentos:

“Todavía no sabemos cuántos contratos faltan de pagar a la gente que les surtió. (...) ¿en qué momento van a cerrar el negocio que tienen con la UNOPS e Insabi?”, cuestionó.

Frenar acuerdo con UNOPS genera incertidumbre: Imco

La falta de planeación en el modelo de contrataciones genera incertidumbre sobre la efectividad de los procesos de adquisición de medicamentos y material de curación, e impacta en el suministro y calidad de las compras de salud, advirtió el Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco).

Para el instituto, la decisión del director del Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), Juan Antonio Ferrer, de suspender el convenio contratado con la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS) genera incertidumbre sobre la efectividad de los procesos de compra consolidada realizados por la agencia internacional.

El acuerdo establecía que la UNOPS “adquiriera medicamentos y material de curación para las instituciones de salud en México con total transparencia y libre competencia hasta el 2024”.

Sin embargo, desde el 2021, el Imco documentó que la asignación de las contrataciones a la UNOPS representaba “retrocesos importantes en materia de transparencia y acceso a los datos mínimos sobre los bienes adquiridos”.

Además, alertó que hubo “incumplimiento y atrasos en la adjudicación de más de mil claves de medicamentos y material de curación para el abastecimiento de 2021. Como muestra de ello, el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales para los Trabajadores del Estado (ISSSTE) realizó una compra emergente ante la situación de desabasto”, señaló el instituto en un comunicado, en coincidencia con las declaraciones que hizo a La Razón el entonces director del organismo, Antonio Ramírez.

El titular del Insabi, durante su comparecencia ante diputados la semana pasada, aseguró que “el sector salud ya está articulado y cuenta con capacidades suficientes, por lo que no se requiere de la UNOPS para las compras consolidadas de medicamentos”.

Ferrer Aguilar argumentó que la compra de medicamentos ya no es un problema y que para las compras que se realizarán entre 2023 y 2024 “se contará con el apoyo de varias instituciones del Gobierno federal, así como de las 32 entidades”.

El Imco señaló que, al cancelar el modelo de compras impuesto con la UNOPS, se da un nuevo giro en la estrategia de distribución mediante el cual el Gobierno federal, a través de Laboratorios de Biológicos y Reactivos Mexicanos (Birmex), será el responsable de distribuir los medicamentos hasta los hospitales y no en almacenes generales, como estaba previsto originalmente.

Sin embargo, indicó que todavía es incierto el plan de distribución en el que también participarán las secretarías de la Defensa Nacional, la Marina y la Guardia Nacional, para garantizar una distribución efectiva de los medicamentos.

El Imco también puso en duda las capacidades del Insabi para cumplir con estos objetivos, sobre todo porque a partir de agosto del 2022 se creó el IMSS-Bienestar, que busca generar las condiciones óptimas para el servicio de salud. Este programa piloto ya funciona en estados como Nayarit, Colima y Tlaxcala.

Finalmente, el Imco hizo un llamado a las instituciones involucradas, como el Insabi, la SHCP y la SFP, para promover la solicitud oportuna y coordinada de los medicamentos requeridos y asegurar las mejores prácticas en materia de centralización y distribución de compras.

Acusan a IP por haber impedido compras

El Presidente Andrés Manuel López Obrador acusó a los empresarios farmacéuticos de haber ordenado el cierre de mercados para impedir que su administración pudiera adquirir los insumos médicos, aún en el extranjero.

“No podíamos comprar en el extranjero. Es como los medicamentos. No tan así, porque el caso de los medicamentos era un atraco. ¿Saben qué hicieron?, cerraron el mercado, no se podía comprar ni una penicilina, ni la vitacilina, ‘ah qué buena medicina’; no se podía comprar para el ardor, porque no lo permitía la ley”, aseguró el mandatario.

El Gobierno federal determinó cambiar el esquema de compras de medicamento en el segundo semestre de 2019, para lo que contrató a la Oficina de Naciones Unidas para Proyectos y Servicios (UNOPS), a quien le encargó la adquisición de todos los medicamentos que requiere el servicio de salud pública. Sin embargo, aseguró que los empresarios se coludieron para impedirlo.

“Entonces, ¿a quién había que comprarle todo? A los políticos que vendían los medicamentos, políticos corruptos, que ni los menciono porque tampoco voy a estar yo haciendo el trabajo, que corresponde a todos, pero no se podía, nos costó liberar el mercado”, afirmó.

Por su parte, Mario Delgado, presidente nacional del partido Morena, se pronunció por hacer una revisión sobre el acuerdo suscrito entre el Insabi y la UNOPS, en julio del 2020, para la adquisición de medicamentos y materiales de curación, a fin de verificar cuáles podrían haber sido las inconsistencias que impidieron el cumplimiento de sus metas.

Luego de que La Razón publicará este lunes información sobre el incumplimiento en las adquisiciones entre el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) y la Oficina de las Naciones Unidas para Servicios y Proyectos (UNOPS), Mario Delgado consideró pertinente realizar esta revisión.

El presidente nacional del guinda afirmó que uno de los grandes problemas que enfrentó el actual Gobierno al iniciar su gestión fue la corrupción en la compra de medicamentos, pero, subrayó, esta administración lo enfrentó con un modelo innovador a nivel mundial.

Persiste desabasto de fármacos en institutos de salud pública

El desabasto de medicamentos e insumos médicos persiste, a pesar de que las autoridades han descartado que esto aún sea un problema para el país, luego del incumplimiento del acuerdo establecido con la Oficina de Naciones Unidas para Proyectos (UNOPS) para garantizar la disponibilidad de estos productos en en territorio mexicano.

Mil 285 reportes acumulados en lo que va del 2022 dan cuenta de la falta de fármacos y materiales en las instituciones de salud, de acuerdo con registros del proyecto Cero Desabasto, impulsado por la organización Nosotrxs.

No obstante, a poco menos de tres meses de que concluya el 2022, la cifra se encuentra 65 por ciento por debajo de lo que se documentó en todo el 2021, con tres mil 706 reportes de desabasto.

La carencia en materiales de curación acumula 22 reportes en el año; de medicamentos, mil 183; de vacunas, 35, y otros no especificados, 42.

“Arturo” es un hombre de 64 años, derechohabiente del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), que desde hace casi un año se encuentra bajo tratamiento psiquiátrico para enfrentar el deterioro cognitivo y celotipia —un trastorno delirante irreversible que hace pensar que su pareja le es infiel— que han puesto la integridad física de él y su familia en peligro.

Durante los últimos meses ha logrado mantenerse bajo control, gracias al medicamento, pero ahora, al intentar conseguir los medicamentos, la respuesta que recibió la última vez en el Hospital Regional de Alta Especialidad Bicentenario de la Independencia, ubicado en Tultitlán, es que los fármacos no se encuentran disponibles.

Donepezilo, fluoxetina y valproato de magnesio son algunos de los fármacos con los que el hombre y su esposa esperan a que el ISSSTE los provea desde hace algunos días.

Una alternativa para él, como otros que también esperan los mismos, es acudir al Hospital Psiquiátrico Fray Bernardino Álvarez, donde pueden adquirirse medicamentos por una cantidad más baja, pero ahí sólo queda una pieza de donepezilo y “no se sabe cuándo llegarán más”, según dijo personal encargado, al ser consultado por este medio.

En un recorrido realizado por La Razón en clínicas del Valle de México, se pudo constatar que la falta de medicamentos o insuficiencia en los servicios es una situación que aún se antepone a la procuración de su salud.

En la clínica del mismo instituto ubicada en Ecatepec, derechohabientes que esperaban formados para entrar a consulta expresaron preocupación porque, aunque la situación no es “igual de grave que antes”, siguen sin que sus recetas sean surtidas al ciento por ciento.

El caso de Doña Mary es uno. Se trata de una mujer de 60 años, quien padece diabetes y que lleva cerca de dos meses sin recibir complejo B por parte del ISSSTE, razón por la cual ha pagado entre 400 y 600 pesos en farmacias privadas para contar con éste, lo que representa un golpe a su bolsillo, al considerar que “yo no trabajo y sólo tengo de lo que puedan darme a veces mis hijos y que no siempre pueden mucho”.

Otros derechohabientes también manifestaron que, meses atrás, el servicio de rayos X se interrumpió en esta clínica, pues la máquina no servía, lo que aplazó, dijeron, el avance que pudieron tener al contar con los estudios que los médicos les solicitaban.

En la clínica 25 del IMSS, ubicada en la calzada Ignacio Zaragoza, comerciantes de la zona comentaron a La Razón que hasta hace algunos meses la gente llegaba a buscar medicamentos fuera de las instalaciones, donde se encontraban vendedores clandestinos que de alguna manera lograban sacar fármacos del recinto médico para ofrecerlos.

“Hay personas que se quejan porque los revisan a las salidas, pero pues es que se sabe que antes sacaban medicamentos. Apenas creo que agarraron a alguien por supuesto narcomenudeo y ya no es algo nuevo, pues últimamente se ha visto mucho en las noticias eso de que hay mucha fiesta dentro de los hospitales; creo que está bien que exista control”, comentó uno de los comerciantes.