Gilda Austin y Solís, madre del exdirector de Pemex, Emilio Lozoya, aseguró que la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) cuenta con pruebas de la corrupción del expresidente Enrique Peña Nieto y, a diferencia “del enjuiciamiento contra su hijo, la Unidad no procede en contra del exmandatario”.
La madre del exdirector de Pemex hizo pública una carta que dirige al Presidente Andrés Manuel López Obrador, en la que cuestiona que su hijo esté preso y no otros exfuncionarios a quienes se ha denunciado.
“Señor Presidente: ¿Por qué mi hijo, siendo testigo colaborador y habiendo cumplido con todos los requisitos establecidos en la ley, está en la cárcel?, ¿por qué se nos persigue a las mujeres de la familia, siendo inocentes?, y ¿por qué no se ha llamado a los verdaderos responsables a comparecer?”, expuso.
Agregó que confía en que el Presidente quiere que se conozca la verdad, por lo que cuestionó que, si incluso en conferencias de prensa el titular de la UIF, Pablo Gómez, “ha manifestado que tiene pruebas suficientes en contra del expresidente Peña Nieto, no se ha procedido”.
Al finalizar la última audiencia intermedia en el Centro de Justicia Penal Federal del Reclusorio Norte de la Ciudad de México, la madre del exdirector de Pemex dio lectura a dicha carta en la que cuestiona el hecho de que su hijo se mantenga en prisión y no otros exfuncionarios a los que se ha denunciado.
Solicitó ayuda del Presidente y le externó que estaba segura de que, siguiendo valores de justicia que ella reconoce en el mandatario, que son “morales, cristianos y éticos”, cumplirá lo que públicamente ha prometido varias veces.
“Respetuosamente me dirijo a usted, recordándole que en varias mañaneras ha manifestado que está de acuerdo que en el caso de mi hijo Emilio, siendo testigo colaborador y valiente como usted lo ha expresado, por haber denunciado a varios exfuncionarios del sexenio pasado que incurrieron en sobornos para lograr la Reforma Energética, pueda acceder a un criterio de oportunidad, con la cantidad fijada tanto por la Fiscalía General de la República, la Unidad de Inteligencia Financiera y la empresa Pemex”, comentó.
Gilda Austin también está procesada y en prisión domiciliaria. La Fiscalía General de la República (FGR) solicitó el lunes imponerle 21 años y tres meses de prisión por los delitos de asociación delictuosa y lavado de dinero por el caso Odebrecht.
En la misiva con fecha de 13 de marzo, Gilda Austin también afirmó que las mujeres de su familia están siendo víctimas de persecución, “siendo inocentes”. Esto, debido a las acusaciones que versan en su contra y de su hija Gilda Susana Lozoya Austin.
En el texto escrito a mano, la madre del exfuncionario refirió su complacencia hacia el juez Gerardo Alarcón López, al considerar que “defiende los derechos humanos, el secreto bancario y la vida privada de los ciudadanos”.
La resolución del juez de Control Gerardo Genaro Alarcón López se dio tras la negativa de la FGR y de Petróleos Mexicanos (Pemex) de llegar a un acuerdo reparatorio con Lozoya Austin y su defensa legal, debido a que las autoridades federales consideraron insuficiente el monto de compensación que ofrecía el exservidor público procesado.