La Iglesia Católica acusó que México necesita fortalecer la “cultura de la paz”, por lo que celebró la organización de la Segunda Marcha Nacional por la Mujer y la Vida, en donde colectivos provida se reunieron este domingo en diferentes entidades del país, incluida la capital, para manifestarse en contra de la legalización del aborto a nivel nacional.
A través del editorial de su semanario Desde la Fe, la institución señaló que nuestro país está urgido de “la cultura de la paz, del encuentro social, del apoyo solidario y del respeto a la vida del otro”, por lo que las manifestaciones de los grupos provida son una oportunidad para “promover el respeto a toda vida humana”, lo cual incluye a “los pequeños antes de nacer”.
La Iglesia Católica remarcó su postura en contra de las exigencias de colectivos feministas por aborto legal y gratuito, y, en este sentido, señaló que las manifestaciones de grupos provida permiten sensibilizar a la sociedad sobre “la necesidad de cuidar de las mujeres ante las ideologías que intentan desaparecer la feminidad, y ante la cultura del descarte que las orilla a deshacerse de sus hijos antes de nacer, al no tener las posibilidades de llevar a buen puerto su maternidad”.
La institución remarcó que el llamado a ver por las mujeres y por los más vulnerables es un primer paso para “hacer un exhorto a favor de la paz”. Por ello, invitó a los manifestantes de este domingo, así como a todas las comunidades del país, a “dialogar, para que juntos analicen qué está pasando en su entorno y qué respuestas pueden darse a sí mismos para vivir más tranquilos”.
RFH