El Presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró ayer que no se tiene información acerca del despliegue de personal de inteligencia rusa en México.
“No tenemos información sobre eso”, dijo al ser cuestionado sobre si había espías rusos en nuestro país.
Esto en referencia a las declaraciones hechas ayer por el jefe del Comando Norte, Glen VanHerck ante senadores estadounidenses, en las que advirtió que actualmente la porción más grande en el mundo con miembros de la Agencia de Inteligencia Militar rusa (GRU por sus siglas en ruso) está en México.
“Pues es una declaración. Nosotros no vamos a cuestionar nada, somos respetuosos de la libre manifestación de las ideas”, dijo el Presidente López Obrador.
El mandatario agregó que México es un país libre, independiente, soberano, pero que debe saberse cada vez más, porque parece a veces que no se entiende lo suficiente, por lo que habría que enviar telegramas avisando que México no es colonia de ningún país extranjero.
“No somos colonia de Rusia, ni de China ni de Estados Unidos, México es un país independiente, libre y soberano’’, reiteró el mandatario.
Mencionó que los mexicanos no van a Moscú ni a Pekín a espiar, ni tampoco van a Washington, ni siquiera a Los Ángeles a espiar, porque se tiene como política la no intervención, todo ello, en referencia a la invasión que mantiene Rusia sobre Ucrania que ya lleva más de un mes.
También puntualizó que en México no se impide a nadie, a ningún extranjero que quiera llevar a cabo actividades legales en el país.
“Los que son delincuentes y cometen delitos, se les detiene, no se permite ni a mexicanos ni a extranjeros cometer delitos en nuestro país”, señaló.
Desde el inicio de la invasión rusa en Ucrania, México ha condenado esa acción y ha apoyado el envío de ayuda humanitaria a Ucrania, pero no se ha adherido al envío de equipo militar a los ucranianos ni a las sanciones económicas a los rusos.
El jueves, durante una audiencia ante el Comité de Servicios Armados del Senado de Estados Unidos, el jefe del Comando Norte, Glen VanHerck, dijo que la mayor cantidad de personal de inteligencia ruso estaba desplegada en México.
Habló en específico de miembros de la Agencia de Inteligencia Militar rusa (GRU por sus siglas en ruso), quienes estarían vigilando muy de cerca sus oportunidades para influir en oportunidades y acceso hacia Estados Unidos, según aseguró el militar estadounidense.
VanHerck incluso agregó que los cárteles del narcotráfico generaron las condiciones que pueden ser aprovechadas por los agentes rusos para afectar la seguridad nacional de Estados Unidos.
A pesar de señalar que existen condiciones de inestabilidad en México, el militar destacó la colaboración que se realiza con la Secretaría de la Defensa Nacional y con la Secretaría de Marina, que han desplegado a sus elementos para la seguridad en el país y el combate al crimen organizado.
“Son firmes como aliados en seguridad y siguen siendo un baluarte para contener la presencia en Centro y Sudamérica de las organizaciones criminales transnacionales”, señaló el general.
La embajadora de Ucrania en México, Oksana Dramarétska, calificó como una vergüenza que los legisladores en México se hayan reunido con la representación de Rusia para estrechar lazos de amistad, lo que los convierte en “cómplices de asesinos”.
“Apoyar a asesinos es participar en sus crímenes; condenamos la participación de los legisladores porque avalan las matanzas de los rusos”, dijo.
En entrevista con La Razón explicó que los diputados del PT y Morena están demostrando su amistad con el presidente ruso Vladimir Putin y su régimen criminal, porque aplauden la matanza de estas personas y de los niños.
“Existe un Grupo de Amistad con Ucrania al igual que con Rusia, pero la participación de ayer de los legisladores mexicanos al estar con la representación rusa es una vergüenza, no honra a ninguno de nuestros miembros del parlamento. Están demostrando su amistad con Putin y su régimen criminal, porque aplauden la matanza de estas personas y de los niños”, condenó.
Por otra parte dijo que no ha habido reuniones con el secretario de Relaciones Exteriores Marcelo Ebrard, aunque se mantienen en contacto con la cancillería, pero pidió rechazar las agresiones a Ucrania de parte de Rusia. “Yo estuve en un encuentro con el canciller y la Unión Europea al inicio de la guerra, después de ahí no hemos tenido ningún tipo de reunión con Marcelo Ebrard, aunque estamos en contacto con la Cancillería”.
A un mes de la invasión se estiman dos mil muertos en Ucrania por los bombardeos, de los que 128 son niños y niñas, mientras que en esa nación ya escasean alimentos, agua y luz, por lo que piden ayuda internacional inmediata.
La diplomática detalló que la situación humanitaria se está deteriorando y la ciudad de Mariupol es la más afectada y cada vez se ve más dañada la economía e infraestructura.
La embajadora dijo que han sido desplazados de manera interna 10 millones de ciudadanos, pero 3.6 millones ya salieron a otros países como Hungría, Polonia, Eslovaquia, Moldavia y Rumania, pero la mayor parte está en Polonia, y afirmó que ven a México como una posibilidad para llegar.
AI ve confusa la postura del Gobierno ante la invasión de Moscú a Ucrania
A un mes de la invasión rusa a Ucrania, Amnistía Internacional asegura que la posición de México es confusa, pues por un lado hace un llamado al cese al fuego y por otro diputados se reúnen con una delegación rusa.
“La posición del embajador ante la ONU, Juan Ramón de la Fuente ha sido la de llamar al Gobierno de Rusia a detener la invasión, “pero resulta confuso que el embajador de Rusia dé un posicionamiento en el Congreso de la Unión e inaugure un Grupo de Amistad. Confunde mucho a la opinión pública”, aseveró Edith Olivares Ferreto, directora Ejecutiva de Amnistía Internacional México.
En entrevista con La Razón, Olivares agregó que no es el mejor momento para que el Gobierno de México tenga una posición a favor de Rusia, “que es el que está cometiendo violaciones a derechos humanos en Ucrania; es una posición contradictora de México ante el panorama internacional”.
La activista señaló que se ha documentado que Rusia ataca a la población civil, utiliza armamento no permitido, no se respeta la libertad de expresión y viola los derechos humanos de hombres, mujeres y niños.
“Hemos podido documentar que el Gobierno de Rusia está atacando instalaciones en donde hay civiles, lo que es una flagrante violación a los derechos internacionales, ya que no están respetando a las personas que no participan directamente en la guerra. Están violando también los derechos humanos de la gente, ocasionando que sean desplazadas a otros territorios”, dijo.
La directora ejecutiva señaló que hasta el momento no se sabe cuántos civiles y menores han fallecido en los bombardeos, ya que es difícil tener un censo en la zona de crisis humanitarias, pero aseveró que al menos han sido dos centenas de personas las que han perecido.
Reduce Rusia objetivos militares: se centra en la región de Donbás
Rusia insinuó ayer que podría estar reduciendo sus objetivos de guerra. El Ministerio de Defensa dijo que los objetivos de la “primera etapa de la operación” se habían “cumplido principalmente”, con el poder de combate de Ucrania “significativamente reducido”.
El mayor general Sergei Rudskoi informó que Rusia ahora se concentrará en derrotar a las fuerzas ucranianas en la región oriental de Donbás. Y aunque “no excluye” asaltos a las principales ciudades ucranianas, como Kiev, dijo que apoderarse de ellas no era un objetivo principal.
Asimismo, Rudskoi precisó que están “supervisando de cerca” la discusión en Occidente sobre el suministro de aviones y sistemas de defensa aérea a Ucrania.
“Si esto se implementa, no lo dejaremos desatendido. Es un gran error. Esto prolonga el conflicto, aumenta el número de víctimas y no podrá influir en el resultado de la operación”, expresó.
Por su parte, autoridades militares de Ucrania reconocieron que las fuerzas rusas dominan ya gran parte de la región de Donetsk, donde ya han logrado el control de varias ciudades y asedian otras tantas.
El jefe de la administración militar regional de Donetsk, Pavlo Kirilenko, destacó, sin embargo, que el Ejército ucraniano mantiene el control de las “ciudades principales” de la región. Es el caso de Mariúpol, uno de los principales centros urbanos de la zona y que se encuentra desde hace días asediada por las tropas rusas.
Caso contrario es Volnovaja, que ha sido tomada por Rusia tras la retirada de las tropas ucranianas después de dos semanas de intensos combates. Kirilenko señaló que la ciudad, a medio camino entre Donetsk y Mariúpol, en el sureste del país, ha quedado prácticamente en ruinas por la destrucción de la mayoría de edificios: “Volnovaja como ciudad ya no existe. La infraestructura de la ciudad ha sido destruida”.
Según el gobierno de la ciudad de Mariúpol, el ataque aéreo perpetrado por Rusia el 16 de marzo contra un teatro que era utilizado como refugio para civiles, afuera del cual escribieron en ruso “Niños”, para que fuera visible desde el cielo, provocó la muerte de unas 300 personas de las mil 300 que estaban resguardadas en el lugar.
Asimismo, alrededor de la mitad de la población de Járkiv, una ciudad del este de Ucrania, ha huido y la comida y otros artículos de primera necesidad se están agotando para los que se quedaron. Los soldados ucranianos volvieron a posicionar sus fuerzas al oeste de Kiev en medio de informes de que habían expulsado a los rusos tras intensos combates.
De acuerdo con el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para Refugiados, desde que empezó la invasión de Rusia, cerca de una cuarta parte de la población de Ucrania, más de 10 millones de personas, se han visto obligadas a huir de sus hogares.
Unas 3.7 millones de personas han huido del país, la crisis de refugiados que más rápidamente ha crecido desde la Segunda Guerra Mundial. Además, 6.5 millones de personas han sido desplazadas dentro de Ucrania, y al menos 13 millones están varados en las zonas afectadas o no pueden salir, señaló.
Al respecto, la UNICEF dijo que uno de cada dos niños ucranianos (4.3 millones de los 7.5 millones estimados) fueron desplazados desde que comenzó la invasión. Esta cifra incluye más de 1.8 millones que han cruzado a los países vecinos como refugiados, y 2.5 millones que están desplazados internamente. Añadió que 78 niños han muerto y 105 han resultado lesionados.
Buscan rompernos
Por separado, el ministro de Exteriores de Rusia, Sergéi Lavrov, afirmó que Rusia enfrenta una “guerra total” declarada por Occidente, ante el cúmulo de sanciones contra la economía y el sistema financiero del país, además de contra su presidente, Vladimir Putin, y los oligarcas rusos tras la invasión a Ucrania.
“Se nos ha declarado una verdadera guerra híbrida, una guerra total. (Su objetivo) es destruir, romper, aniquilar y estrangular a la economía rusa y a Rusia como conjunto. (Pero) tenemos muchos amigos, aliados y socios en el mundo, un gran número de asociaciones en las que Rusia trabaja con países de todos los continentes, y seguiremos haciéndolo”, apuntó, y añadió que la gran mayoría de los estados no se sumarán a las sanciones occidentales contra Moscú.
Con información de Jorge Butrón