Al menos cinco personas extranjeras se cosieron los labios, ayer, en Huixtla, Chiapas, como forma de protesta con el objetivo de presionar a las autoridades del Instituto Nacional de Migración (INM) para que entreguen formas migratorias múltiples y avanzar hacia el norte del país.
En imágenes que compartió Pueblo sin Fronteras a este diario se ve a personal de enfermería suturar los labios de los extranjeros, mientras que la gente les aplaude y grita: “sí se puede, sí se puede”.
A pesar del dolor, los migrantes aguantan, y de inmediato son auxiliados por los demás que les “echan” aire con ropa o pedazos de papel para que no se sientan mal. “Vamos, vamos, dale, dale”, es el grito de aliento de los migrantes.
Esta forma de manifestación se ha ocupado en otras caravanas como un método para que las autoridades volteen a verlos y hagan caso de sus demandas.
El director de Pueblo sin Fronteras y vocero de la caravana, Irineo Mujica, informó que enviaron toda la documentación al INM, para que resuelva la situación del éxodo que se dirige a la Ciudad de México, pues requieren de regularización para seguir su camino hacia Estados Unidos.
“Hemos mandado los documentos necesarios para que el INM responda sobre la situación y crisis migratoria. Tenemos más de ocho mil personas en Huixtla, sin embargo, duermen en la calle y se encuentran muchos enfermos”, dijo.
Al momento, la caravana con al menos cinco mil personas se encuentra estacionada en Huixtla, en espera de que las autoridades se acerquen a dialogar, pero se espera que ya no avance y salga del territorio como se había anunciado, pues los migrantes vienen cansados, con heridas en los pies u otras dolencias, principalmente por el clima y la humedad.