El bloque de la Cuarta Transformación aprobó en lo general y lo particular, con la mayoría calificada requerida, la reforma constitucional que permite el traspaso de la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
Las reformas, las cuales modifican los artículos 13, 16, 21, 32, 55, 73, 76, 78, 82, 89, 123 y 129 de la Carta Magna, fueron avaladas con 86 a favor y 42 sufragios en contra en lo general; mientras, en lo particular fueron 86 a favor y 42 en contra; con los 128 senadores presentes.
Además de su adscripción a la Sedena, se da a la Guardia Nacional la facultad de investigar delitos, pues el dictamen establece: “la investigación de los delitos corresponde al Ministerio Público, a las policías y a la Guardia Nacional, en el ámbito de su competencia, las cuales actuarán bajo la conducción y mando de aquél en el ejercicio de esta función”.
Intercambio de opiniones se extendió hasta la madrugada
El oficialismo y la oposición cruzaron acusaciones y reproches durante un debate, el cual, se extendió durante la madrugada y mañana de este miércoles 25 de septiembre.
La enmienda constitucional es una apuesta a la investigación e inteligencia de la seguridad pública y detención de quienes cometen los delitos; así como la atención a las causas, aseguró Omar García Harfuch, senador de Morena y próximo secretario de Seguridad y Protección Ciudadana.
“Esta es la política más importante y necesaria para disminuir la inseguridad, que es la necesidad permanente de atender las causas que generan la violencia, de atender a los más pobres y a los más necesitados, de sacar a nuestros jóvenes y darles alternativas para darles alternativas y no sean reclutados por el crimen organizado”Omar García Harfuch, próximo secretario de Seguridad Federal
Con la reforma en materia de guardia constitucional, apuntó García Harfuch, se busca un “nivel de coordinación máxima entre la Sedena y Semar, totalmente coordinados con las entidades federativas”.
“A la gente no le importa si es un delito del fuero federal o del fuero común. Lo que exige es que los delitos se resuelvan y para que eso ocurra, también partimos de una premisa muy sencilla: no se pueden acabar los delitos si no se detiene a los que los cometen”, consideró.
Por su parte, el coordinador del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Manuel Añorve, testificó que la “militarización” de la Guardia Nacional “no es una solución, es un disfraz para esconder que no dieron los resultados prometidos una y otra vez. Esta reforma constitucional que promueve el gobierno de Morena confirma, nuevamente, que su política de seguridad es un rotundo fracaso”.
Anunció el voto en contra de esta enmienda constitucional por parte del PRI. El bloque de la Cuarta Transformación expuso Añorve Baños, “no tiene la voluntad ni las ganas de pacificar al país; además subrayó: “al oficialismo no le interesa solucionar el problema de la violencia. Votaremos en contra pues ustedes, obviamente quieren militarizar el país, dejaremos constancia que estamos totalmente en contra”.
Aliados de Morena defienden traspaso de la GN a Sedena
Luego, el senador del Partido del Trabajo, Alberto Anaya consideró imperativo la transferencia de la GN a la Defensa Nacional; y recalcó: “no se trata de un retroceso. Se trata de un avance estratégico y lo central, en este avance estratégico, es que la pacificación de este país continúe y, se quiera o no, así va a ser”.
“Tiene que ser así, porque eso va a asegurar ante todo preparación, eso va a asegurar ante todo disciplina, eso va a asegurar ante todo profesionalismo y eso va a asegurar, lo más importante, que la Guardia Nacional se blinde contra cualquier esfuerzo que pretenda corromperlas”, aseveró el coordinador petista.
La Guardia Nacional, bajo el mando de la Sedena, enfatizó el el coordinador de la bancada de Movimiento Ciudadano, Clemente Castañeda, “distorsiona el diseño institucional del estado mexicano, su organización interna y que fractura de manera muy delicada el equilibrio y la separación entre el poder civil y militar”.
“No cuenten con nosotros para esta atrocidad. Lamento mucho que el corolario de este gobierno, que se dice de izquierda, sea la militarización de la seguridad pública o de la vida pública”, afirmó el emecista.
Harfuch y Godoy piden licencia en el Senado
Al término de la sesión, el pleno del Senado concedió licencia por tiempo para separarse de sus funciones administrativas a las senadoras Ernestina Godoy Ramos y Citlalli Hernández Ramos y al senador Omar García Harfuch, que se incorporarán al gabinete de Claudia Sheinbaum, presidenta electa. Las licencias correrán a partir del 30 de septiembre próximo.
Ernestina Godoy será la próxima consejera jurídica de la titular del Ejecutivo Federal; Citlalli Hernández ocupará la titularidad de la Secretaría de las Mujeres, de reciente creación; y Omar García Harfuch, será el próximo secretario de Seguridad y Protección Ciudadana.
Amalia García, senadora de Movimiento Ciudadano, y Cinthya López Castro del PRI, fueron las únicas legisladoras de oposición que desearon éxito a los próximos funcionarios.
“A la senadora Ernestina Godoy, a la senadora Citlalli Hernández, al senador Omar García Harfuch, desearles que hagan un trabajo con la dedicación, la entrega que desea y que merece nuestro país, la mejor de las suertes y nuestra felicitación a nombre del grupo parlamentario de Movimiento Ciudadano y del mío propio”, dijo Amalia García.
Gerardo Fernández Noroña, presidente del Senado, citó a sesión vespertina el 29 de septiembre próximo, a las 16:00 horas.
Modificaciones avanzan en 12 congresos locales
La minuta para que la Guardia Nacional (GN) quede bajo el control de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) ya consiguió el aval de 12 congresos locales.
Hasta el corte de esta edición, la aprobación se había concretado en los estados de Tabasco, Zacatecas, Quintana Roo, Ciudad de México, Durango, Baja California, Sinaloa, Tlaxcala, Colima, Yucatán, Campeche y Oaxaca.
Ayer por la mañana, el Senado de la República aprobó la minuta que reforma 12 artículos de la Constitución para que la Guardia pase a las Fuerzas Armadas, como lo promovió el Presidente de la República en la iniciativa enviada en febrero de este año.
El proyecto indica que la GN deje de ser considerada una institución policial de carácter civil y pasa a ser una “fuerza de seguridad pública, profesional, de carácter permanente e integrada por personal de origen militar con formación policial dependiente de la Sedena en apego a la Estrategia Nacional de Seguridad Pública”.
Para que la reforma entre en vigor debe conseguir el aval en al menos 17 de los 32 congresos estatales, para luego ser turnada al Presidente y que éste la publique en el Diario Oficial de la Federación.
El primer congreso en avalar la reforma fue el de Tabasco, cuyos diputados decidieron madrugar para aprobar de forma casi inmediata este cambio constitucional, lo cual se alcanzó con 27 votos a favor.
En el caso del congreso capitalino, el aval se consiguió con 43 votos a favor y 19 en contra.
Durante el debate, el panista Mario Enrique Sánchez consideró que la seguridad pública a cargo de la Federación ha sido ineficiente y ha llevado a demeritar la labor de las corporaciones policiales.
En cambio, la morenista Xóchitl Bravo aseguró que el traspaso de la Guardia a Sedena tiene el respaldo de los casi 36 millones de votantes en las pasadas elecciones, en referencia a los votos que recibió Morena en la elección presidencial.
La petista Elizabeth Guerrero mencionó que esto sólo da sustento a una práctica que ya existe y que fortalece a México y que garantiza que las labores que realice la Guardia se den con apego al respeto a los derechos y les dote de certeza jurídica.
cehr
