Con 69 votos a favor, Morena y sus aliados en el Senado de la República aprobaron en lo general y lo particular la reforma a la Ley de Amparo, con la que se limita a jueces en el otorgamiento de suspensiones ante la presentación de amparos contra leyes que expida el Congreso, sobre lo cual la oposición acusó que se ha despojado a la población y sectores de la herramienta jurídica que ha permitido la defensa ante abusos.
La iniciativa fue propuesta por el senador Ricardo Monreal Ávila para modificar los artículos 129 y 148 de la Ley de Amparo, Reglamentaria de los artículos 103 y 107 de la Constitución para que cuando se resuelvan juicios de amparo y se determine la inconstitucionalidad de una norma general, “en ningún caso las suspensiones que se dicten fijarán efectos generales”
En palabras del senador Damián Zepeda, esto significará que al eliminar la posibilidad de que los jueces concedan suspensiones, mientras se resuelve un juicio contra alguna norma, se podría consumar el “daño” que ésta podría representar.
“Esa fracción es la que le interesa al Gobierno, para que no les puedan parar sus actos de uso y aprovechamiento de los bienes de dominio… No va a haber poder humano que pare un acto abusivo que esté dañando la población”, dijo en tribuna.
La priista Nancy de la Sierra dijo que con esto México se coloca como un ejemplo de fortalecer una reforma contraria a fortalecer la protección de derechos humanos, ya que elimina un medio de protección para los ciudadanos.
Y aunque el autor de esta reforma, el presidente de la Junta de Coordinación Política, Ricardo Monreal, calificó con manoteos estos argumentos como “alejados de la realidad”, provenientes de una “enorme ignorancia”, que son una “gran estupidez creada en la mente de la perversidad y de malos mexicanos”, admitió directamente que el objetivo de esta reforma es evitar que un juez decare inconstitucional una norma avalada por el Poder Legislativo.
“Precisamente lo que yo no quiero con la reforma es que el juez declare inconstitucional una norma, el juez no puede declarar inconstitucional una norma, está impedido… es invadir nuestro trabajo y no puede derogar una norma que ha surgido de un proceso legislativo del Congreso
puede proteger a una persona de actos reclamados, pero no puede decir que la norma es inconstitucional”, dijo.
El zacatecano insistió en defender que lo que se aprueba en el Congreso no debe ser modificado por jueces, ni tampoco por otros órganos como el INE o la Corte, porque lo ve como una “dictadura de la toga”.
El senador Germán Martínez le preguntó si no le parece un exceso este término, cuando ni con suspensiones judiciales se ha logrado nombrar las vacantes del INAI, y al mismo morenista se le concendió una contra Layda Sansores para que dejara de calumniarlo, a lo que Monreal respondió: “A la compañera Layda Sansores ya la perdoné, somos amigos de partido y hay de todo en la viña del señor”.
La priista Nadia Navarro reviró y dijo que en el Poder Legislativo “no somos perfectos” para lo cual recordó que se frenaron reformas como el Plan B electoral que ocurrió con faltas al proceso legislativo
“Queremos defender la voluntad del legislativo, pero también tenemos la obligació de ceñirnos al proceso legislativo, respetar las formas y la ley, por eso existe el Poder Judicial, para defender estos contrapesos. Nadie quiere usurpar la voluntad de nuestro voto, pero no soms del todo merecedores del reconocimiento. Aquí han votado como aplanadora sin razonar, sin defender y considerar la ley”, reclamó.
Del mismo partido, Beatriz Paredes, consideró que se llevó a cabo un falso debate al intentar, desde Morena, defender lo que se legisla en el Congreso, porque en este mismo “hay una mayoría parlamentaria subordinada al Poder Ejecutivo que, a juicio de algunos, vota y legisla legislaciones inconstitucionales que son señaladas e impugnadas por algunos ciudadanos”.
Dijo que la aprobación de esta reforma no corresponde a la tendencia de democratización y, para ella, significa una regresión en donde el Poder Legislativo actualmente quedó subordinado a la partidocracia. Además, dijo que ser una mayoría legislativa, como la que conforman Morena y aliados, no significa cerrar el diálogo con las minorías, sino generar consensos.
Ahora lo aprobado será enviado a la Cámara de Diputados, donde se turnará a Comisiones y se llevará al pleno para su rectificación.
JVR